Ciudad

Adultos mayores que viven solos: trabajan catastro en Concepción para conocer realidad local

Según Casen 2022, el 14,5% de este rango etario no comparte hogar en el Biobío. Proyecto de Ley busca tipificar como delito el abandono social de adultos mayores . Coordinadora regional de Senama destacó que se trabaja normativa que apoye a las personas que ejercen el cuidado.

Por: Ximena Valenzuela 14 de Abril 2024
Fotografía: Cedida

Chile está experimentando rápidamente un envejecimiento poblacional, según cifras del INE, las personas de 60 años y más se han triplicado en los últimos 30 años.

De hecho en 1992 dicha población era de un millón 311 mil 699 personas y, en 2022 llegó a 3 millones 598 mil 554. Las proyecciones para 2050 hablan de 6 millones 942 mil 883.

Según datos aportados por el Servicio Nacional del Adulto Mayor, actualmente, a nivel regional un 20,1% de la población es adulto mayor. Se contabilizan 337 mil 646 personas de 60 años o más, de las que 150 mil 895 son hombres y 186 mil 751 mujeres.

El desglose por grupo etario indica que hay 95 mil 737 personas entre 60 y 69 años; entre 70 y 79 suman 105 mil 15 individuos, mientras que de 80 años y más se registran 55 mil 589.

La descripción aportada revela, además, que el 23,9% de los adultos mayores sufre dependencia y, de estas 18,5% no cuentan con cuidador, cifras que resultan preocupantes si se considera que a 2050 los adultos mayores de la Región hayan aumentado en 12 puntos porcentuales.

Además, el desglose regional entregado por el Servicio Nacional del Adulto Mayor, en base a al último informe de la Encuesta Casen 2022, advierte que del total regional de las personas sobre los 60 años, el 14,5% viven solas, de éstos el 70% de los jefes de hogar son varones y el 16,7% viven en condición de pobreza.

Ante dicho panorama se hace necesario una política pública que asegure que los adultos mayores reciban apoyo y los cuidados necesarios, sobre todo, considerando la expectativa de vida es alta, alcanzando 86 años en mujeres y 73 años en hombres.

Janine Albarrán, coordinadora regional del Senama, destacó que desde agosto del año pasado están trabajando en el proyecto de Ley Integral de los Derechos de las Personas Mayores y Envejecimiento Digno, Activo y Saludable que, además de fortalecer y descentralizar el organismo que dirige, tiene como punto clave el que tipifica el delito de abandono social.

“Hoy la discusión está centrada en quién está obligado a asumir los cuidados (…) La Constitución dice que el núcleo fundamental de la sociedad es la familia. Por lo tanto, debería quedar consagrado que el núcleo familiar debiese ser parte de los cuidados”, sostuvo la coordinadora regional.

El citado proyecto legislativo comenzó su tramitación en el Congreso el 2020 y actualmente se encuentra en la Comisión de Personas Mayores y Discapacidad de la Cámara de Diputados, en segundo trámite constitucional para luego ser derivado a Hacienda.

A su vez, comentó Albarrán, que a través de un proyecto de Ley llamado Sistema Nacional de Cuidados, el Estado impulsará una ayuda dirigida a quienes ejercen los cuidados, “probablemente con un sistema de compensación, con algún tipo de estipendio, para que no queden en desmedro”.

Complementó afirmando que ambos proyectos están siendo trabajados con carácter de suma urgencia, pues tanto quienes necesitan ser cuidados como quienes ejercen la labor de cuidar requieren una mayor protección. “Hoy no existe nada que nos permita regular la situación de las personas mayores. Hay leyes en materia de mujer, de protección a infancia, entre otras, pero no de protección a las personas mayores”, dijo y agregó que se debe avanzar hacia una sociedad que genere ciertas garantías para poder llegar a la vejez de una mejor manera, con dignidad y sin temor de enfrentarla solos.

Se espera que, a través de los datos que arroje el nuevo Censo, no sólo se actualice la cuantificación de adultos mayores, su sexo y condiciones en las que viven, sino que también dichos datos aporten para el trabajo de Senama y para el desarrollo de políticas públicas dirigidas.

Los efectos de vivir en soledad

“Vivir sólo no es necesariamente vivir en soledad. Hay muchas personas que lo hacen por opción, porque se sienten autovalentes y capaces de realizar una serie de actividades y que, además, mantienen contacto con la sociedad, por ejemplo, asistiendo a clubes o desarrollando hobbies”, aseveró Albarrán.

Sin embargo, existen circunstancias en que la soledad no es la mejor compañía como es el caso de quienes viven en el abandono o la carecen de redes de apoyo que les apoyen en labores domésticas, les acompañen al médico o, simplemente conversen con ellos.

El aislamiento social, cuando no es voluntario, puede generar complicaciones, aseguró Susana Martínez, psicóloga y gerontóloga, pues dicha soledad puede llevar a la depresión y angustia, entre otras patologías.

Aseveró que las personas mayores que viven solas porque nadie las quiere acompañar ni cuidar comienzan a presentar un deterioro mental, pues “el no convivir con otras personas psicológicamente les hace muy mal y lo fisiológico viene aparejado a esto. Comienzan a perder la funcionalidad, pueden terminar postrados, y además, esto se suma con que se alejan de toda la red comunitaria”.

Luis de la Fuente, ex presidente de la Unión Comunal de Adultos Mayores de Talcahuano, afirmó que la soledad que experimentan los adultos mayores que viven solos es tremenda. “Se debe abordar el abandono con una política pública que los resguarde, que haga que los hijos se hagan cargo de los padres, porque muchas veces de lo único de lo que se preocupan los hijos es de cómo se repartirán las herencias cuando los padres partan”.

Agregó que, además, se debe impulsar una mejora en las pensiones para que puedan tener una vida digna “poder comprar lo que necesitan y vivir sin necesidad de que alguien los mantenga”.

La psicóloga y gerontóloga destacó el programa Vínculos de Senama que trabaja con adultos mayores que viven solos, que están alejados de sus derechos, que no cuentan ni siquiera con carné de identidad y no asisten a controles en Cesfam, entre otras particularidades, para reinsertarlos en la sociedad y así evitar que tengan una vejez con patologías. “Una persona que no es feliz de por sí va a hacer crisis de manera física, va a agudizar problemáticas de base que pueda tener”.

Un adulto mayor puede vivir solo, dijo la especialista, pero la diferencia está en no vivir en soledad y, precisamente, para evitarla recomendó a las personas deben generar redes durante su vida y ser buenas personas con quienes les rodean para que, en el momento que requiera apoyo, por ejemplo, si padece alguna patología, cuente con apoyo.

Catastro detallado

Anita Hernández, presidenta de la Unión Comunal de Adultos Mayores de Concepción, aseveró que es necesario contar con un registro actualizado de los adultos mayores de la Región y, especialmente, de quienes viven solos.

Por ello, según dijo, actualmente están trabajando con Senama en un catastro que permita advertir en caso de emergencia u otras eventualidades cuántos adultos mayores hay en el sector, identificarlos y saber sus direcciones. La iniciativa, que nació a raíz de los incendios forestales, tiene como finalidad “entregar la información a las juntas de vecinos, autoridades en general, Carabineros y Bomberos para que puedan acudir en su auxilio”.

La iniciativa, según dijo, no sólo contribuirá a ayudar a los adultos mayores en caso de emergencia, sino también para que sus datos estén disponibles para entregar los beneficios del Estado y que las ayudas lleguen directamente a las personas que lo necesitan.

Según dijo, esperan implementar la iniciativa no sólo a nivel comunal, sino también en la Región y que prontamente se replique en todo el territorio nacional.

Además la dirigenta, que pertenece a la Federación Regional de Adultos Mayores, están trabajando en otro catastro que permita identificar a los cuidadores de adultos mayores, pues muchas veces también son senescentes que quedan solos cuando la persona a la que cuidaban fallece.

“Quedan aislados de todo porque sólo fueron cuidadores, pero nunca reconocidos, no tienen ninguna ayuda social. Queremos que sean identificados para que no queden en el total abandono”, comentó.

Beneficios actuales

“Muchas veces se entiende que los adultos mayores que viven solos están desvalidos, pero lo cierto es que el 78% de ellos son autovalentes y sólo un 22% (dependencia leve y moderada) requieren de algún apoyo, y dentro de esos el 5% tienen dependencia severa”, dijo la coordinadora de Senama.

Por ello, el organismo cuenta con un programa de formación de escuelas de dirigentes que trabaja con organizaciones sociales como las federaciones regionales y provinciales y uniones comunales de adultos, entre otras, para contribuir al desarrollo personal y realización de actividades. Instancia a la que durante el año pasado postularon 890 organizaciones.

En materia de cuidados cuentan con 13 centros comunitarios diurnos en la Región en los que personas que tienen dependencia leve o moderada pueden participar para recuperar su funcionalidad y participar en diversas actividades de estimulación física y cognitiva, entre los que se encuentra el primero a nivel rural, ubicado en Santa Juana.
Además, para personas que viven solas, que pertenecen al 60% más vulnerable y no cuentan con una casa propia, el organismo tiene 6 condominios de viviendas tutelares que no sólo entregan una solución habitacional, sino que además ofrecen acompañamiento, cuentan con una monitora y, durante este año, incorporaran una técnico paramédico para favorecer aún más su estadía.

En tanto, para personas que no son autovalentes en la Región existen 2 centros de larga estadía, uno en Hualpén y otro en Coronel, que atienden a 60 y 90 personas respectivamente que, en general, son víctimas de abandono, de maltrato en su núcleo familiar, o bien, que no tienen ninguna red de apoyo.

Para realizar el ingreso se aplican una serie de evaluaciones, informes sociales y de salud que determinan la necesidad de ingresar al centro. En otros casos, el acceso es determinado a través de tribunales donde se obliga a darles un cupo.

Etiquetas