En el helipuerto de la Base Naval Talcahuano tuvo lugar la mañana de este lunes 27 de noviembre, la ceremonia de cambio de mando de la Comandancia en Jefe de la Segunda Zona Naval, donde el contraalmirante Daniel Muñoz Miranda puso término a su año de gestión, haciendo entrega del cargo al comodoro Oscar Manzano Sanguinetti, lo que se simbolizó con el arriado y el despliegue de las respectivas insignias de mando a bordo de la Reliquia Histórica “Huáscar”, las que recibieron los honores de salva mayor.
La ceremonia que contó con la presencia de autoridades civiles y militares de la Región del Biobío, entre quienes se encontraba la delegada presidencial Daniela Dresdner, el gobernador regional Rodrigo Díaz, oficiales dependientes de las Guarniciones Navales de Talcahuano y Valdivia e invitados especiales, fue presidida y tuvo como interventor al Jefe del Estado Mayor general de la armada, vicealmirante Yerko Marcic Conley ante quien se protocolizó el cambio de mando con la firma del acta de entrega.
El vicealmirante Marcic, agradeció a las autoridades regionales el apoyo y el trabajo interagencial desarrollado junto al Contraalmirante Muñoz durante el presente año, “todas las autoridades fueron parte del éxito del contraalmirante Muñoz en su gestión al mando de la Segunda Zona Naval. Sin la participación de todos ustedes no hubiera podido cumplir su misión a cabalidad con la excelencia que lo hizo”, indicó
Asimismo felicitó a quien fuera el comandante en Jefe de la Segunda Zona Naval, como también a las dotaciones bajo su mando “hago un reconocimiento a cada uno de ustedes, quienes son los que siguieron con excelencia las directrices del contraalmirante Muñoz para contribuir con su trabajo y con sus resultados a la misión de la Armada de Chile (…)”.
Durante su discurso de despedida el contraalmirante Muñoz destacó las tareas cumplidas como comandante en jefe de la Segunda Zona Naval y como Jefe de la Defensa Nacional para las provincias de Arauco y Biobío, cargo en el que permanecerá hasta mediados de diciembre, “responsabilidad que se convirtió en el mayor desafío de mi carrera”, resaltó.
“Al recibir el mando de esta Zona Naval ya acarreaba cinco años de Estado de Excepción, inicialmente por catástrofes debido a los incendios, luego se sumaría el Estado de Excepción de Emergencia en la Macrozona Sur y este año las inundaciones. Esto nos obligó a redoblar esfuerzos y continuar la posta, objeto enfrentar los demandantes escenarios de estos Estados de Excepción”, indicó.
También recordó que uno de los desafíos de este año fue llegar hasta los últimos rincones de la región, dando a conocer el quehacer de la Armada y motivando el ingreso a las Escuelas Matrices. “Todo esto se pudo realizar gracias al trabajo mancomunado de marinos, hombres y mujeres que con un extraordinario espíritu de superación y sentido del trabajo en equipo aportaron desde su rol específico al cumplimiento de la misión de la Segunda Zona Naval”, destacó.
En ese contexto agradeció a los oficiales y a las dotaciones que estuvieron bajo su mando, en quienes destacó el liderazgo, la lealtad, la subordinación, el profesionalismo, la actitud para cumplir cada una de las tareas en la Segunda Zona Naval y en la Jefatura de la Defensa Nacional “estableciendo patrullajes y puntos de control en los Estados de Excepción, armar partidas para apagar incendios, asumir puestos de guardia y sus rutinas, desfilar, mostrar a la Marina ante la ciudadanía, la limpieza y ordenamiento de la Base Naval, realizar operativos cívico militares de ayuda a comunidad, entre muchas otras tareas”, señaló.
Tras concluir las palabras de despedida y agradecimiento el Jefe del Departamento de Operaciones de la Segunda Zona Naval, capitán de Fragata Julio Carvajal Madariaga, acompañado por el Condestable Mayor de la Comandancia en Jefe de la Segunda Zona Naval suboficial Mayor Víctor Estay Toledo hicieron entrega de la Insignia de Mando, la que durante el año 2023 fue izada en la Reliquia Histórica “Huáscar”.