La idea se centra en la prevención e intervención. Vale recordar que en el Biobío ya se han judicializado cinco femicidios consumados durante este año.
Desde enero de este año que la seremi de la Mujer y Equidad de Género lleva adelante en Coronel un plan que incorpora 66 medidas para la prevención e intervención ante la violencia de género.
Ahora, la seremi del ramo, Lorena Segura, anunció que la idea piloto será replicada en toda la Región del Biobío. Para aquello se van a articular 53 servicios públicos. “Vamos a coordinar también con Seguridad Pública para establecer medidas de prevención en cada actividad que desarrollen estos servicios públicos a nivel territorial. Para el 2023 aumentamos en un 8,7% el presupuesto del Ministerio destinado principalmente a fortalecer el Sernameg y dar mejor respuesta las mujeres que viven violencia”, señaló Segura.
También, reiteró el llamado a contar cuanto antes con la Ley por el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. “Como Ministerio ingresamos distintas indicaciones como lo son la creación de un sistema integrado de casos que permita la interconexión y coordinación de la distintas instituciones intervinientes en caso de mujeres que viven violencia”, destacó y agregó que a esto se le suma el acompañamiento judicial de las medidas cautelares decretadas que permitan hacer un seguimiento.
Vale recordar que hasta la semana pasada se habían judicializado cinco casos de femicidio consumado en la Región del Biobío. Esto corresponde a dos causas más que en todo el año pasado cuando la cifra fue de tres.
Silvana Del Valle, Integrante de la Coordinación Nacional de la Red Contra la Violencia hacia las Mujeres y académica de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma comentó que “lo que se ha visto en los últimos meses es que ha habido un relajo en la forma en que se tratan estos temas”.
Además, comentó que el tratamiento mediático de algunas situaciones de violencia es poco serio y no toma el peso real a situaciones como la del dirigente de fútbol español al dar un beso sin consentimiento a una seleccionada. “La prensa chilena e internacional tergiversan el tema, tratado como si fuese un asunto cómico o justificándolo (…) y básicamente nos lleva a pensar que las mujeres tenemos la culpa de lo que nos sucede”, expuso Del Valle.
Este tipo de tratamiento de los problemas pueden darse de asuntos extremos como un femicidio y también en situaciones que se dan en lo cotidiano, lo que puede generar un efecto copia, explicó Silvana Del Valle.
“Cuando los agresores ven que los medios de comunicación tratan el asunto con liviandad y sin un énfasis en la prevención se producen aumentos en los hechos de violencia”, apuntó.
Casos como el de Nabila Rifo marcados por su crueldad trajo consigo este efecto copia, la académica indicó que “hay artículos académicos, es muy analizado en el mundo (…) después de ocurrido el caso muchos agresores amenazaban a las mujeres diciendo que las iban a dejar igual que a Nabila. Se dio mucho en los dos años posteriores a la situación tan brutal”.
En tanto, Consuelo Hermosilla, directora y Fundadora de la Fundación Antonia, afirmó que considera que falta prevención, inversión y políticas públicas. “Todas las veces que nosotros nos enteramos de este tipo de crímenes, nos duele porque trabajamos a diario para poder evitarlo, y la verdad es que es frustrante saber que va a seguir pasando”, expresó.
En tanto, Marcy Lu Sandoval, psicóloga de Fundación Antonia, comentó que “estos crímenes a todos nos muestra lo enfermos que estamos como sociedad (…) la incapacidad del otros de aceptar el rechazo en el término de una relación, porque ve al otro como un objeto y no como un sujeto, mientras no se aborde la salud mental va ir siempre creciendo”.
La educación emocional en edad temprana, según Sandoval es vital y agregó que “los niños deben saber identificar sus emociones, límites y manejar estas estructuras básicas para poder vincularse con el otro”.