Presidenta del directorio y parte de la gerencia de la estatal energética participaron de la cita donde diputados, dirigentes sindicales y el alcalde de la comuna fustigaron con fuerza el actuar de la empresa.
A paso veloz y sin hablar con la prensa, así se retiró del Colegio Blanca Estela, ubicado en Hualpén, la presidenta del directorio de la Empresa Nacional del Petróleo (Enap), Gloria Maldonado.
Y es que las dos horas y cuarto previas a su rauda salida, estuvieron llenas de críticas de parte de los integrantes e invitados a la sesión de la Comisión Especial Investigadora de Eventuales Irregularidades cometidas por Enap, en el periodo 2014 a la fecha y que por primera vez se constituyó en la zona.
Por ello, y tras el fin de la cita, la principal directiva de la estatal energética, se fue sin emitir comentarios junto al gerente general (i) de la compañía, Patricio Farfán, quien si detuvo un momento para señalar que “vamos a participar en todas las comisiones a las que nos inviten porque Enap no tiene nada que ocultar y vamos a seguir trabajando transparentemente con la Comisión tal como ha sido hasta ahora”.
Los primeros en emitir cuestionamientos al actuar de empresa fueron las y los diputados que conforman la instancia, entre ellos Leonidas Romero (Ind. pro PR), Sergio Bobadilla (UDI) y Eric Aedo (DC) quienes coincidieron en que Enap debe replantear su relación con las comunidades donde están emplazadas sus faenas, pagar impuestos en esos territorios y mejorar su vinculación con los trabajadores, en especial con los subcontratados.
Más moderada fue María Candelaria Acevedo (PC), quien sostuvo que hay que esperar el resultado del trabajo de Comisión antes de emitir un juicio. “En su debido momento vamos a evaluar y vamos a entregar lo que ha significado esta Comisión Investigadora. Hoy día no podemos opinar a priori en cuanto a cuál es el resultado”, precisó la parlamentaria.
Uno de los temas que logró instalarse en la cita fue el del pago de la patente que realiza la Enap por el funcionamiento de la refinería en Hualpén, el que asciende a $27 mil, según señaló el alcalde Miguel Rivera, quien ha sido particularmente crítico con la empresa y su forma de operar de en la zona.
“Hasta el almacenero paga mucho más que eso, el ferretero, la gente que trabaja en la ‘cola’ de la feria libre. Es una vergüenza, no tiene otro apelativo”, aseguró el jefe comunal.
La respuesta a ello estuvo en voz de la gerencia de la empresa, que señaló en la Comisión que para pagar un mayor tributo en la comuna se requiere de una modificación a la ley de rentas municipales, lo que fue confirmado por las y los diputados presentes, que esperan poder legislar prontamente en esta materia, que requiere que el gobierno ingrese un proyecto de ley sobre este punto o patrocine alguna iniciativa parlamentaria al respecto.
Al finalizar la reunión, José Gutiérrez, dirigente de los vecinos del sector el Triángulo, quienes participan de un proceso de relocalización porque sus viviendas están demasiado cerca de la empresa, sostuvo que el dinero asignado tras un acuerdo entre el Gore, el Serviu y Enap, hoy impiden a más de 80 familias adquirir una vivienda, esto por que el valor de éstas ha aumentado a casi el doble y que con lo que tienen, simplemente no alcanza.
“En este minuto los $47 millones para esta relocalización que están ganados por lo que dio el Serviu, el Gobierno Regional y Enap, con esa plata no compramos nada. Aquí en Hualpén la casa más barata vale 70 u 80 millones de pesos y están que se caen solas”, aseguró el representante de los vecinos, que pidió a la empresa hacer un esfuerzo y aumentar el monto para poder terminar con este proceso que se ha extendido por 5 años.