Opiniones disimiles obtuvo en la ciudadanía el Índice de Calidad de Vida Urbana 2021, llevado a cabo por la PUC y la Cámara Chilena de la Construcción. Límite de alturas, seguridad y transporte, entre las principales críticas.
Esta semana se dio a conocer que Concepción es la segunda ciudad con mejor calidad de vida para vivir en Chile, después de Concón. Posición que si bien fue valorada por la municipalidad, tuvo opiniones disímiles a través de redes sociales.
Lo anterior, ya que si bien algunos valoraron los resultados del Índice de Calidad de Vida Urbana (Icvu) 2021, elaborado por el núcleo de investigación sobre gobernanza y ordenamiento territorial del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) y la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), otros los criticaron, ya que no consideran que Concepción tenga una buena calidad de vida.
Las críticas se basaron en el estado de las calles, la falta de seguridad y conectividad desde y hacia el centro penquista, dejando en último lugar la visión de la CChC, quienes advierten que la capital regional podría retroceder en futuras mediciones, debido a que el actual Plan Regulador Comunal (PRC), aleja a la gente de la ciudad al limitar la construcción en altura, empeorando la calidad de vida de los penquistas.
“Al modificar el PRC que limitó las alturas, principalmente en la zona centro, implica una menor densidad poblacional en Concepción. Al estar esto presente, tendremos escasez de departamentos, impidiendo que las personas puedan vivir cerca de equipamientos y fuentes de trabajo, obligándolos a vivir lejos, lo que conlleva invertir en transporte y tiempo de desplazamiento, perdiendo calidad de vida”, explicó el docente de Urbanismo de la Universidad de Concepción (UdeC) y vicepresidente de la CChC, Bernardo Suazo.
Argumentó sus dichos manifestando que “para evitar retroceder en futuras mediciones, considerando que el Icvu midió el 2021 cuando el PRC recién llevaba unos meses en vigencia, la solución sería densificar la ciudad entre 18 a 22 pisos en promedio, algo que se debe conversar, ya que se debe llegar a un equilibrio. En ese sentido se debería crear un nuevo PRC, en vez de seguir modificándolo, porque de seguir en esa visión de ciudad, con menor altura, el vivir en Concepción centro cada vez será más caro”.
Realidad que visualizó la Cámara el año 2019, cuando llevaron a cabo una encuesta para ver qué era lo que más le preocupaba a la ciudadanía, siendo la altura una de las últimas prioridades.
“Limitar las alturas, no era una de las prioridades de la gente, sí lo era la seguridad, el estado de calles y veredas. La altura estaba en el lugar 13 de 17 variables que medimos antes el estallido social”, precisó Suazo.
Desde el municipio, el alcalde Álvaro Ortiz, si bien valoró la buena noticia dada a conocer por el Icvu, ya que constituye un desafío para el municipio, criticó la visión del gremio de la construcción, respecto a que el límite de alturas empeora la calidad de vida de los penquistas.
“La vida en Concepción ya era costosa antes de la entrada en vigencia de la modificación del PRC, que fijó una altura máxima de los edificios, ya que los proyectos privados que se están llevando a cabo no están apuntando al déficit de vivienda, sino que son unidades para la inversión y no se condice con lo que apunta el municipio, es decir, una ciudad que crezca a escala humana con respeto al patrimonio y el medioambiente”.
A juicio del alcalde Ortiz los edificios de gran altura, una vez entregados, son muy caros de mantener, que incluso han evidenciado casos donde los vecinos no han podido mantener sus servicios de gas o luz en áreas de uso común, al no pagar todos sus gastos comunes.
“A la CChC le interesa el negocio de construir, a nosotros nos preocupa la ciudad, ya que el centro no puede seguir saturándose así, la densificación en altura sólo empeora las condiciones de vida de la gente”, sentenció el jefe comunal.
Desde Patrimonio Industrial Biobío, Juan Carlos Santa Cruz, en tanto, manifestó que “si bien Concepción ofrece una cierta variedad de servicios no quiere decir que la calidad de vida sea mejor. La visión de la CChC, respecto a que ha influido el límite de las alturas, es una excusa, porque ese es el negocio de sus socios, que se contrapone a la visión de ciudad que tiene la municipalidad penquista, que cree que lo ha hecho estupendo. Sin embargo, esto no es así, ya que la alcaldía no se ha hecho cargo de problemáticas reales que demanda la ciudadanía”.
Aclaró que, “si el Icvu hubiese preguntado a los encuestados ¿cómo ve la calidad de vida, respecto a cinco años atrás? Muchos dirían que está peor, puesto que la vida urbana está más insegura, más sucia, el transporte no ha mejorado y los tacos son cada vez más grandes. Esa es la real razón de la fuga de gente a otros puntos del Gran Concepción”.