Masiva concurrencia, que incluso generó tacos a la hora de almuerzo y micros llenas, prueba del entusiasmo por ir a las urnas. Adultos mayores madrugadores, llenos de esperanza y muchos perdidos de sede, junto a jóvenes que llegaron en masa a los 14 lugares de votación. Camino a casa, alguien comentó “gracias por estar aquí, no le fallamos al país”. Todos asintieron.