Seremi de Transporte, Jaime Aravena: “Es imposible tener una norma de distanciamiento en buses”

Casi a diario el ministro de Salud, Enrique Paris, recalca lo importante que es el distanciamiento social para evitar contagiarse de coronavirus, a pesar de ello, no existe una norma que lo exija, por ejemplo, en el transporte público.

“Es imposible tener una norma de distanciamiento social en el transporte público (…). No se ha hecho en ninguna parte del mundo, porque tiene muchas restricciones. Por ejemplo, quién decide quién se sube o no. Para hacerlo necesitarías el doble de buses en el Gran Concepción, serían 2 mil más para movilizar a la misma gente, de dónde sacas esas máquinas, no existen”, dijo a Diario Concepción el seremi de Transporte, Jaime Aravena.

– ¿Y no pueden hacer mejoras para aumentar la frecuencia?

– Precisamente, en el plan Paso a Paso o desconfinamiento que hicimos nosotros, contempla facilitar la movilidad de las personas al interior de las ciudades. Mejorando tiempos de semáforos, haciendo ciclovías temporales, demarcar sentido de desplazamiento en paseos peatonales, ensanchando veredas para cuando todos los locales abran y se generen más filas y las veredas no alcancen, ahora sólo las ocupan los bancos.

– ¿Pero no hay medidas para el transporte público?

– Ahí tenemos el problema, porque para generar distanciamiento físico hay que producir mayor frecuencia de buses y dar seguridad a las personas que en tres minutos llegará la próxima máquina.

– Gestión de tránsito.

– Claro y como no podemos aumentar la cantidad de buses hay que aumentar la frecuencia, subiendo la velocidad promedio de desplazamiento y eso se logra con gestión de tránsito, dejando los corredores exclusivos para buses y eso se lograr con mayor fiscalización.

– ¿Se ha logrado?

– Estamos tratando de que las frecuencias en horario punta sean de dos o tres minutos y fiscalizamos para que se pueda cumplir.

– ¿Se evalúa solicitar a empresas y servicios un horario diferido que pudiera contribuir a evitar aglomeraciones?

– Sí, lo estamos trabajando con los Ministerios de Economía y del Trabajo, esa gestión depende de ellos.

– ¿Cuándo se logre podría existir una norma de distanciamiento en el transporte público?

– Si logramos todas las medidas temporales anunciadas, gestión de semáforo con la Unidad Operativa de Control de Tránsito (Uoct) fiscalización de frecuencia y de corredores, más la salida diferida de empresas y universidades podrías tener una norma.

– ¿Cuáles son los tiempos para concretar el plan?

– La parte nuestra lo antes posible, esperamos que en agosto. Algunas son muy rápidas, demarcaciones que estarán listas para usar cuando la autoridad sanitaria lo determine.

– Entonces, ¿no hay fecha para una norma que limite el número de pasajeros?

– No hay fecha y no es el camino que vamos a tomar para lograr un distanciamiento social en el transporte público. El camino que vamos a tomar es generar mayor espacio a través de una mayor frecuencia de buses, ingreso y salida diferido de los trabajos.

– ¿Cómo asegurarán a la gente que tendrá locomoción para que eviten subirse a un bus lleno?

– Estamos haciendo algunas exigencias tecnológicas a los buses para que podamos saber online dónde están y sus horarios.

– ¿No queda más que pedirle a la gente que evite aglomeración?

– Estamos fiscalizando el uso de mascarillas, tanto de pasajeros como conductores, y estrictas medidas de sanitización de las máquinas y haciendo una gestión para que las empresas pongan una separación entre el conductor y los pasajeros, pero es una sugerencia, no es obligatorio.

– ¿Y qué hacemos entonces?

– Por el momento, la gente nos puede ayudar usando mascarillas, intentar distanciarse y evitar aglomeraciones que se dan, principalmente, en la tarde, porque los buses dejan de funcionar entre las 19 y 20 horas, antes del Toque de Queda.

– ¿El que los pasajeros no tengan certeza de frecuencia influye en que los buses vayan llenos?

– Sí, pero también en el afán de los conductores de captar pasajeros, porque ganan por boleto. Ves micros llenas como si fuera un día normal sin pandemia.

– La paralización de los buses en apoyo a Lota y Coronel, complicó los desplazamientos.

– La manifestación pacífica permitió que quienes deseaban trabajar lo hicieran, sin episodios de violencia, a diferencia de lo que se generó en Lota y Coronel, donde una vez más tuvimos actos de violencia y barricadas en algunos lugares que impidieron que los buses de Lota y Coronel, y toda la provincia de Arauco llegaran a Concepción (…). Esperamos que no se generen más dificultades, el Biotrén circuló con más de un 30% de demanda. Sin embargo, no hemos visto aglomeraciones en buses ni vagones del tren ni tampoco en paraderos.