Seremi de Educación afirmó que en todos los ramos se hará énfasis en el desarrollo de habilidades interpersonales. Pero para la Fundación Liderazgo Chile se requiere de una ley más sólida que resuelva los problemas de convivencia escolar.
Por Ximena Valenzuela y Mauricio Luengo
El protagonismo de los estudiantes secundarios en las manifestaciones, en ocasiones violentas, enfrentando a Carabineros con piedras y palos o rompiendo mobiliario urbano para encender barricadas, dejó de manifiesto que los menores no canalizan de buena forma sus emociones, tienen baja tolerancia a la frustración y un limitado control de impulsos ante una situación adversa.
Todo lo anterior requiere, según especialistas, incluir en el currículum escolar la educación emocional, proyecto que la Fundación Liderazgo Chile presentó en octubre a la comisión de Educación del Senado buscando mejorar la calidad de la educación en Chile y resolver los problemas de convivencia escolar que existen.
La idea inicial, afirmó Arnaldo Canales, presidente de la citada fundación, era que el proyecto fuera patrocinado por el Ejecutivo para su rápida tramitación, situación que no se logró “a pesar que puede ser la ley más importante de los últimos cien años, porque cambia todos los conflictos sociales que tenemos ahora y nacen de esta falta de conciencia”.
El proyecto fue presentado por las diputadas Camila Vallejo (PC) y Cristina Girardi (PPD). La primera aportó con una modificación a la Jornada Escolar Completa, mientras que la segunda con la Ley de Aseguramiento de la Calidad de la Educación. “Esas dos leyes las presentaron como Educación Emocional, tomando sólo algunas menciones del original”, comentó Canales.
Agregó que la propuesta realizada por la fundación pedía bajar la ponderación del Simce, que actualmente involucra un “77% y 33% para objetivos personales a 40% para el Simce y 60% para objetivos personales, que ahora se llaman integrales. Eso fue el 14 de octubre, después vino el estallido social y no ha avanzado en nada”.
El presidente de la fundación aseguró que tiene claro que deberá volver al Congreso a hacer lobby para lograr que las leyes sean más sólidas. “Los comportamientos vinculados a conflictos que terminan en violencia son por falta de conciencia. Todos estudian para ser trabajadores, pero no para vivir y sin desarrollo humano, no hay evolución social”, agregó.
Asignaturas incorporadas
El seremi de Educación, Fernando Peña, aseguró que los elementos transversales para la educación emocional hoy están contenidos en el currículum. “En todas las asignaturas hay un énfasis puesto en el desarrollo de habilidades interpersonales. Este año se incluyen en tercero y cuarto medio como asignaturas obligatorias Educación Ciudadana y Filosofía (…) las que hoy debido a la situación social del país adquieren más relevancia”, dijo.
Peña agregó que será decisión del Consejo Nacional de Educación ver si la educación emocional se incorporará como asignatura o ram al currículum, pero el trabajo de los colegios está abocado a reforzar la presencia de la educación emocional como elemento transversal en todas las asignaturas.
La autoridad local sostuvo que se aprovechará el cambio de currículum en tercer y cuarto medio para profundizar en la educación cívica, “las responsabilidades, derechos y obligaciones que tienen los alumnos como futuros ciudadanos e incorporarlo también a otras asignaturas, como por ejemplo, filosofía”.
La idea, comentó, es que de la mano del ejercicio de derechos y deberes también haya un proceso de reflexión alimentado por pensamiento crítico, razonamiento lógico y comprensión del entorno.
Peña dijo que esperan que, al término del Gobierno del Presidente Sebastián Piñera, tengan una visión más completa de lo que anhelan profesores, apoderados y alumnos.
“La educación no va a quedar exenta o fuera de este proceso de revisión y de análisis de lo que está ocurriendo en el resto de la sociedad. Estamos muy abiertos a incorporar dentro del trabajo del Ministerio programas o iniciativas que apunten a reforzar la educación cívica y la educación emocional como elementos importantes de la trayectoria y la formación educativa de los alumnos”, manifestó Peña.
No como ramo
La ex ministra de Educación, Mariana Aylwin, que estuvo de visita en Concepción, aseguró que la educación emocional debe incluirse, pero no como una asignatura sino relacionada con el desarrollo de habilidades sociales. “Lo que hoy se llama el desarrollo de la función ejecutiva, el autocontrol, que los niños aprendan a respetarse a sí mismo y a los demás”, explicó.
A su juicio, se debe hacer desde temprana edad y en cada etapa de desarrollo, “porque la adolescencia es un proceso difícil, los jóvenes tienen que tomar decisiones complejas, porque hay muchas situaciones complicadas en las familias y en sus barrios. Por lo tanto, es un elemento esencial, pero no como asignatura, sino que a largo de toda la enseñanza”.
Mariana Aylwin agregó que existe un gran interés de los colegios por trabajar a fondo, tanto en el desarrollo sicosocial de los estudiantes como en la convivencia y la ciudadanía. “Hay espacio para hacerlo, pero aquí lo más importante es una buena formación de los profesores para que entreguen ese importante aporte durante toda la trayectoria escolar de un niño”, enfatizó Aylwin.