Gremio llamó a un paro nacional y se espera la respuesta del intendente, Sergio Giacaman.
Difícil se ve el panorama para los funcionarios y usuarios del Hospital Regional Guillermo Grant Benavente, luego de los dichos del presidente del Colegio Médico, Germán Acuña, acusando a la movilización de la muerte de un menor, y la posterior arremetida de los gremios de la CUT, la Anef y la Fenats, para que el intendente, Sergio Giacaman tomará parte en el asunto y destituyera de su cargo al actual director del recinto, Carlos Capurro.
Sin embargo, finalizada la jornada del lunes, Adolfo Becar, dirigente de la Fenats y quien está en la mira del conflicto, informó que “el paro fue suspendido a la espera de una posible movilización nacional, pero la huelga de hambre continúa”. Agregó que “hoy (el lunes al final del día) hubo conversaciones de dirigentes regionales y nacionales para posibles movilizaciones y acciones legales en contra de todas las acusaciones que se nos han hecho, que fue lo que determina que la huelga de hambre se mantenga y, por ahora, se suspenda el paro”.
Recordar que los gremios definieron el conflicto como de carácter político y dijeron que pedirían una audiencia formal con el intendente para destrabarlo, además de solicitar la renuncia de Capurro quien descartó presentarla con motivo de esta paralización.
El Colegio Médico se hizo parte de la querella presentada por el Servicio de Salud Concepción, en contra de Becar, además de otras (al menos dos) que se presentarían a futuro en conjunto con empresarios de la zona que presta servicios al recinto.
El lunes comenzó el sumario administrativo que será posteriormente solicitado por ley de transparencia por esta entidad y así conocer sus detalles para presentar las posteriores querellas.
“Lo que le interesa a la ciudadanía es poder acceder a los servicios que presta el hospital, es operarse, atenderse y que no se paralicen sus actividades por culpa de las discusiones de un gremio y el director del hospital. Esto debe ser llevado a cabo con altura de miras por todas las partes sin afectar a los pacientes, pues refleja una falta de vocación de los trabajadores de la salud”, concluyó Acuña, quien descartó negligencia médica.