La iniciativa busca paliar el desgaste económico que conlleva cuidar a un familiar enfermo.
El trabajo que realiza un cuidador a una persona con algún grado de discapacidad o postrado, es una labor que genera mucho estrés, ya que el “estar de guardia” 24 horas suele ser muy desgastante y si este trabajo no es remunerado, suele ser mucho mayor.
Con el propósito de mejorar las condiciones del familiar cuidador, el Ministerio de Desarrollo Social, a través del Sistema de Protección Social, entrega un bono denominado como “Estipendio” que viene a paliar en parte las necesidades económicas que conlleva hacerse cargo de un enfermo.
El Pago a Cuidadores de Personas con Discapacidad, se traduce en una transferencia monetaria cercana a los 27 mil pesos. Solo en la Región del Bío Bío, a la fecha se han entregado $827 millones, beneficiando a 2.933 personas. Cifras que se pretenden aumentar de aquí a fin de año a cuatro mil, con una inversión total de 1.375 millones de pesos.
Para poder acceder al beneficio estatal, la persona debe estar inscrita en el Centro de Salud más cercano a su domicilio, cumpliendo el requisito de estar dentro de los 35 puntos del índice Berthel (Sistema de medición de las capacidades de las personas en 10 actividades básicas de la vida diaria) del Ministerio de Salud y pertenecer al tramo A o B de Fonasa.
En el caso de no estar en algunos de los dos tramos mencionados, debe estar inscrito en el Registro Social de Hogares, pertenecer al Sistema Intersectorial de Protección Social, ser beneficiario (a) del Pilar Solidario, además de contar con un cuidador, quien será el beneficiario.
“Si pertenece a uno de estos requisitos, el cuidador, debe dirigirse al Cesfam e inscribirse, así de simple”, indicó el seremi de Desarrollo Social, Alberto Moraga.
Lo relevante de este bono es que puede ser otorgado al mismo cuidador hasta tres estipendios por personas con discapacidad, previo certificado del Cesfam correspondiente, “ si es pariente de estos por consanguinidad o afinidad, y hasta dos estipendios por distintos causantes, si él o la cuidador (a) no tiene vínculo de parentesco con las personas con discapacidad”, señaló Moraga.
Con el fin de hacer más fácil la labor del cuidador, el monto determinado es bancarizado lo que conlleva el subsidio de $700 para el retiro. “Esto permite que la persona no deba ir al IPS a cobrarlo, sino que se le deposita automáticamente en su cuenta rut o cuenta vista del Bando Estado, con dos dos giros gratuitos, por lo que el dinero que recibe de la transferencia es íntegro”, precisó el seremi de la cartera social.
Esto, para la señora Karen Valenzuela es muy importante, ya que el beneficio viene a suplir en parte los gastos que tienen como familia, sobre la enfermedad de su hijo Alejandro, quien sufre una discapacidad a causa de una meningitis no diagnosticada. “Al no estar en el Auge el valor del medicamento es cercano a los 250 mil pesos. Esto es súper complicado para nosotros, ya que la situación laboral no ha estado fácil y hoy, aunque sea una parte del costo, para nosotros es importante poder recibir este ingreso adicional, nos ayuda mucho”, indicó.
Sobre la vigencia del beneficio que es postulado por el servicio de salud correspondiente al domicilio del dependiente, este se extenderá mientras se cumplan los requisitos establecidos para los cuidadores y exista disponibilidad monetaria en las leyes de presupuestos del sector público de los años respectivos, lo que será verificado por el Ministerio de Desarrollo Social.
Este beneficio para la psicóloga María José Millán, es bueno pero se debe dar también un espacio de autocuidado al cuidador, ya que el desgaste emocional que conlleva hacerse cargo de alguien, produce a la larga cansancio para el familiar.
“Las personas que cuidan a un familiar con algún grado de dependencia o dependencia total, necesitan un espacio para ellos, ya que si esto no se hace se puede generar un desgaste físico y mental para el cuidador, por lo que es importante relevar su labor entre los mismos familiares”.