Asaltos ocurren a plena luz del día. No hay detenidos en ningún caso.
“Yo me voy de aquí a fin de mes: no quiero que quede en mi consciencia el peso de que le pase algo a quienes trabajan conmigo”, dijo la banquetera María Fernanda Sutter, dueña del emporio El Mercadito Almendra, en Pedro de Valdivia, el que luego de dos años cerrará sus puertas por la delincuencia, ya que ha sido blanco de seis robos en un año.
El local es del rubro platos preparados y productos gourmet. En 2017, a plena luz del día, fueron asaltados por jóvenes armados con cuchillos “y ahí había que entregar todo no más”.
Tras eso, decidieron no abrir los domingos, pero desde ahí los delincuentes entraron al local de noche. El último robo fue el pasado lunes 22, donde desvalijaron el local por completo, tras romper las cortinas.
Sutter reveló que realizó las denuncias, pero que no ha tenido resultado alguno. “Ayer me llamaron de la PDI por uno de los robos anteriores para asegurarse de que de verdad iba a seguir con la denuncia, y yo les dije que sí. Así que la justicia, cero por acá”.
Tiene más esperanzas con que se aclare el último atraco, “porque uno de los ladrones fue tan pillo que dejó su celular en el emporio, así que al menos podemos creer que algo va a pasar”.
Con todos los robos, las pérdidas suman cinco millones de pesos, “eso sin contar los daños que han hecho en el lugar”.
Sutter aseguró que a los otros locales cercanos también les ha tocado ser blanco de delincuentes, pero que nunca han tenido testigos para apoyar sus denuncias, “porque aquí la gente no pesca, no ven nada, entonces no hay nada que se pueda hacer”.
Por eso, el local cierra a fin de mes, “porque no quiero que le pase algo a alguien, que le peguen un punzazo a alguien. No vale la pena arriesgar la vida de una persona por esto, porque nunca le ha pasado algo a quienes trabajan aquí, pero no quiero que eso pase, prefiero cerrar”, finalizó con tristeza.