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Autoridades discrepan por el ingreso de drogas a centro de Sename

Por: Carolina Abello 25 de Octubre 2017
Fotografía: Romilio Pasmiño G.

Una tensa visita se vivió ayer en el Centro de Internación Provisoria y Régimen Cerrado (CIP-CRC) de Coronel.

A raíz de la visita de la jefa de Justicia Juvenil de la dirección nacional de Sename, Carolina Báez, el recinto se abrió a la prensa, tras los hechos ocurridos el pasado 15 de octubre, cuando siete adolescentes intentaron agredirse y quitarse la vida de distintas formas, en un hecho motivado por el ingreso de sicotrópicos al centro por parte de familiares.

En el recorrido, solamente se pudo ingresar a la escuela El Renoval, administrada por la Fundación Tierra de Esperanza, y a la Unidad de Corta Estadía, la que fue financiada con fondos de Senda.

Sin embargo, a simple vista es sencillo observar las falencias del recinto: las clases se hacen en containers, lo mismo que los talleres. En este último el cielo raso estaba caído. En el gimnasio, pese a haber pintado las murallas, se apreciaban máquinas de ejercicios viejas y roturas en el techo.

Condiciones que debieran mejorar cuando se hagan los arreglos comprometidos por el Gobierno, que en mayo traspasó mil millones de pesos al Sename, pero hasta la fecha la licitación aún no es publicada.

El primer roce se produjo durante la visita, cuando el defensor regional, Osvaldo Pizarro, apelando a la transparencia, exigió que se pudiera visitar el espacio de separación de los menores, habilitado cuando se producen situaciones de emergencia, y el que fue fuertemente criticado en el último informe de la Comisión Interinstitucional de Supervisión de los Centros Privativos de libertad de Adolescentes (Cisc), que consigna que el espacio está en condiciones deplorables. Sin embargo, el seremi de Justicia, Jorge Cáceres, dijo que no se justificaba el ingreso, ya que el espacio sería eliminado y se utilizaría con otros fines.

Y cuando las autoridades se aprestaban a dar declaraciones, un adolescente se descompensó en la unidad de corta Estadía, lo que motivó que se activaran los dispositivos pertinentes. Pese a los intentos de los medios de comunicación por obtener más detalles de lo ocurrido, sólo se informó que el adolescente estaba en buenas condiciones, pero el hecho dio cuenta de que la situación en el recinto está lejos de calmarse.

Ingreso de drogas

Tras el recorrido, Carolina Báez confirmó que las autoagresiones de los jóvenes son gatilladas por el consumo de drogas que ingresan las visitas, específicamente sicotrópicos.

“No es normal que esto ocurra, pero también hay un efecto de imitación en los jóvenes que estamos abordando de la manera más técnica posible”.
En cuanto a medidas concretas, anunció que ya se empezó a trabajar con perros detectores de drogas; se está trabajando con Salud para enviar a los jóvenes a otras unidades si la necesidad traspasa los cupos y se está trabajando en las rutinas de los adolescentes en el centro.

Sin embargo, un detalle llamó la atención: Báez aseguró que, aunque reconocen el ingreso de droga al centro, no tenía conocimiento de que existe ingreso de droga al lugar mediante vía aérea, es decir, con el método conocido como “pelotazo”, es decir, con sustancias contenidas en una pelota de tenis, la que se lanza por sobre los muros del recinto. Esto, pese a las continuas denuncias de Gendarmería .

Fue el dirigente nacional de Funcionarios Penitenciarios, Benito Sarabia, quien aseguró que no descartan ninguna vía de ingreso, pero que por vía aérea van cinco ingresos de droga por vía aérea que han sido detectados por los gendarmes. Agregó que en una de esas oportunidades se incautó marihuana y dos celulares, y que se informa mediante reportes a la mesa conjunta de Gendarmería y Sename.

“Yo no me puedo hacer cargo de lo que conozca o no una autoridad nacional de Sename, pero es injusto que nos culpen con la falta de control en los accesos, cuando aquí hay un problema mayor y que tiene relación con la oferta programática y con la rutina diaria, que tiene que hacerse de una manera atractiva para que ellos se interesen”.

Romilio Pasmiño G.

Van 10 intentos suicidas

En cuanto a las autoagresiones, Carolina Báez aseguró que son 10 los episodios en los últimos días, los que están siendo evaluados por especialistas, trabajando en su diagnóstico y tratamiento.

La directora regional del Sename en el Bío Bío, Rina Oñate, aseguró que las drogas que hoy consumen los jóvenes son de última generación, como sicotrópicos y otras sustancias “que ni siquiera la PDI tiene la posibilidad de determinar de qué drogas estamos hablando”.

Tras la reunión en el centro, el defensor regional, Osvaldo Pizarro, aseguró que estarán pendientes de que se cumpla el compromiso de no utilizar los espacios de segregación.

Agregó que en lo ocurrido el 15 de octubre pasado, no quedó registro alguno del actuar de Gendarmería, situación que se debe corregir, “porque hacen un excesivo ingreso. En septiembre, de los 30 días del mes, ingresaron 28 veces y es mucho, porque la ley establece que sólo deben entrar en incidentes críticos”.

En cuanto al ingreso de drogas, se pidió aumentar el número de horas de Psiquiatría, que es de solo 11 semanales y no está contemplada para los jóvenes condenados que ya son mayores de edad. Agregó que se necesita tecnología que detecte el ingreso de droga e cavidades corporales, para que así se termine el ingreso de sicotrópicos.

Y por último, se requirió revisión de las condiciones de seguridad del centro, a raíz del informe emanado por Bomberos en 2016, que alertaba de riesgo de incendio.

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