A nivel local se invertirán más de $22.000 millones entre 2014 y 2024 para mejorar 10,5 kilómetros.
A nivel local se invertirán más de $22.000 millones entre 2014 y 2024 para mejorar 10,5 kilómetros.
Ximena Andrea Valenzuela Cifuentes
ximena.valenzuela@diarioconcepcion.cl
Costaneras, pasos peatonales, muros de contención y renovación de caletas pesqueras son parte de las mejoras que actualmente muestra el borde costero a más de siete años del terremoto y tsunami que azotó las costas de la Región.
La transformación ha sido ardua e incluye en Bío Bío 14 iniciativas que permitirán mejorar 10,5 kilómetros de longitud -con una inversión estimada de $22.620 millones entre 2016 y 2020- que tienen como eje el turismo, a través de la recuperación del patrimonio histórico, la puesta en valor del patrimonio natural, protección costera y aumento de recreación de la comunidad.
Antonia Bordas, directora nacional de Obras Portuarias, destacó que en la Región se encuentran en ejecución cuatro obras: la primera etapa del borde costero de Buchupureo, ribera de Coliumo en Caleta del Medio, renovación sector Bellavista Quichiuto en Tomé, también en su primera fase y, el borde costero La Tortuga – El Morro. Tareas en las que se está invirtiendo $3.636 millones, lo que equivale al 16% del plan total.
En el caso de la caleta El Blanco de Lota, existe un varadero para embarcaciones menores que sólo ha recibido mantenciones menores, lo que ha provocado que la rampa y carro principal de varado presenten corrosión, situación que está siendo renovada con un gasto de $1.686 millones, obra que ya cuenta con 50% de avance y que debería estar lista en septiembre.
La ribera de Coliumo, que beneficiará a 52.000 habitantes, incluirá un paseo de borde costero de 350 metros lineales, contempla muros de hormigón armado, accesos a la playa, ramplas, escaleras, luminarias y mobiliario urbano. Tendrá un costo de $816 millones y se espera esté terminado en septiembre.
Tomé también contará con un nuevo borde costero en el que se está invirtiendo $1.600 millones entre el sector Bellavista Norte – Quichiuto, que se sumará a la primera etapa que se construyó en 2010. La obra implica 520 metros lineales y 2.700 metros cuadrados de superficie.
La cuarta obra se está desarrollando en Talcahuano e involucra 600 metros lineales de borde costero y una inversión de $646 millones está pronta a finalizar. La faena permitirá proteger la zona desde La Tortuga hasta el Puerto de San Vicente.
Otros planes
Bordas detalló que se están realizando siete proyectos arquitectónicos, realizados a través de un convenio de colaboración con la Universidad del Bío Bío, para sectores como Playa Negra Penco, Boca Norte Lebu, Laguna Grande San Pedro, Sector Maule Coronel, Tumbes, Marina Pública Talcahuano y Cuevas Benavides de Lebu.
"Estamos haciendo un levantamiento con una mirada territorial que se habría hecho hace muchos años, hemos trabajo en el ámbito comunal, todas las iniciativas tienen consultas ciudadanas, se involucra a los alcaldes y Juntas de Vecinos y, en otras obras trabajamos con la Armada para determinar las seguridades que ellos requieren en bordes costeros".
Y pronto se iniciarán dos estudios básicos para renovar el Muelle de Enacar en su calidad de patrimonio histórico donde se realizará un estudio básico de análisis estructural, entradas y accesos "porque ahí queremos generar un desarrollo turístico de alto impacto, recuperar el patrimonio que ahora está siendo afectado por el agua. No podemos dejar que desaparezca esa parte de la historia".
El estudio considerará levantamientos crítico, sondajes terrestres, marítimos, calicatas, topografía, batimetría y arqueología subacuática, entre otros, conducentes a restaurar el muelle y habilitarlo como paseo turístico, conexión con el parque de Lota para vincular el paseo de borde costero con un circuito actualmente en uso. Estudio que tiene un costo de $400 millones y tiempo de desarrollo de 450 días.
Además, se trabajará en un anteproyecto para mejorar la Desembocadura Norte del Bío Bío como patrimonio natural donde se busca renovar 680 metros lineales por $600 millones.
Todos planes con los que buscan responder a la vocación del territorio, potenciar las actividades relacionadas al turismo, pesca y deportes náuticos, fomentando el desarrollo económico y local, recuperándolos para el uso y disfrute de espacios costeros, dejando ya de lado el impacto de la reconstrucción y orientándose al ámbito turístico, llevando a la ciudadanía el mar, ríos y lagos sin dar la espalda a los cuerpos de agua, para lo que tienen proyectadas las 14 iniciativas que renovarán más de 10 kilómetros a nivel local y 75 en todo el país.
Apuesta local
Antonia Bordas aseveró que como Gobierno se propusieron generar importantes cambios en 10 años, que implican cerca de $350 mil millones para distribuir en el país, pero desde la mirada de las regiones, motivo por el que se decidió trabajar con alumnos recién titulados o en proyectos de tesis pertenecientes a la Universidad del Bío Bío, que han generado proyectos con alta rigurosidad técnica, con énfasis en el ordenamiento territorial, seguridad e, incluso, pensando en corredores ecológicos.
Las ideas presentadas, a juicio de la directora nacional de Obras Públicas, revisten alta importancia, pues son creadas por los futuros profesionales de la Región y que luego de terminadas, la cartera que dirige deberá realizar la ingeniería de detalle para luego plasmarlas como una obra.
– ¿Los 14 proyectos quedarán listos durante esta administración?
– No, como MOP no podemos pensar en terminar todos estos proyectos en un período de Gobierno por que son de alto aliento y con altas inversiones. En esta región son 14 proyectos, que involucran las 10 comunas costeras que tenemos y 22 mil millones de pesos que vamos a invertir, en eso estamos ya con cuatro obras en ejecución.
– Entonces, la próxima administración tendrá una serie de tareas?
– Queda pendiente seguir haciendo los levantamientos y diseños. Nosotros vamos a dejar los proyectos en un punto sin retorno, con todos trabajados con la comunidad, que se genere un empoderamiento ciudadano, si la gente los hace suyo se van a ejecutar rápidamente.
Son 14 proyectos con un alto costo si los miramos juntos, pero que se pueden hacer en tres períodos de gobierno: en este, el próximo y el que viene.
– ¿Cómo estamos preparados en materia de tsunami?
– Se ha generado un trabajo de concientización de que los espacios costeros podemos habilitarlos, pero mitigando los riesgos. No hay infraestructura que logre mitigar un tsunami en ninguna parte del mundo por lo que se debe tratar que la menor cantidad de viviendas esté en la primera línea, intentar ocupar los espacios costeros de manera adecuada para que no se generen tantos daños porque los muros de contención existentes, principalmente, sirven para disminuir el impacto de marejadas.
– ¿Cuál es el nivel de inversiones?
– Desde 2002 a 2014 como Dirección de Obras Portuarias habíamos generado 14 mil metros lineales de borde costero y ahora desde el 2014 hasta el 2024 vamos a generar 75 mil. Ese es el impacto de lo que está detrás de la visión del Estado de Chile, distinta a la anterior porque tenemos que involucrarnos con el borde costero porque somos un país costero, es una mirada que va más allá de los gobiernos.
– ¿Qué obra a nivel local podría ejemplificar la renovación del borde costero que se ha realizado?
– Un ejemplo local de este cambio de mirada es lo que pasó en Lenga, ahí se hizo una inversión con la que se creó un muro de protección y se creó un espacio público donde antes sólo había un espacio vacío, con un terreno socavado, donde la gente sólo se estacionaba para comer empanadas. Ahora es un espacio público consolidado que contribuye a la economía local y al turismo y que además, contribuyó para proteger el lugar ante el tsunami de 2010.