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Preocupa baja en comprensión lectora en los "alumnos 4G"

En segundo medio los jóvenes exhiben una caída de 7 puntos en comprensión lectora durante la última década. Fenómeno se asocia al uso del smartphone.

Por: Diario Concepción 28 de Abril 2017
Fotografía: imagen_Principal-436.jpg

En segundo medio los jóvenes exhiben una caída de 7 puntos en comprensión lectora durante la última década. Fenómeno se asocia al uso del smartphone.

 

Tania Merino Macchiavello
tania.merino@diarioconcepcion.cl

Los llamaron alumnos 4G, para definir a al grupo de estudiantes que está permanentemente ocupando un smartphone y que aprovecha cualquier fragmento de tiempo dentro de la clase para buscar un contenido de su interés en su celular. Ese es el grupo sobre el que el Ministerio de Educación y la Agencia de Calidad de la Educación deben fijar hoy con mayor atención la mirada, debido a que, según los resultados de la prueba Simce entregados ayer, presentan una evidente baja en los puntajes. 

Un fenómeno preocupante que llega a ensombrecer el positivo avance logrado por la Región que, por primera vez, se situó sobre el promedio nacional en la disminución de la brecha socioeconómica, según los resultados de cuarto y sexto básico y segundo medio. Por ejemplo, en los resultados de lectura para cuarto, la diferencia entre el grupo socioeconómico más alto y el más bajo cae en 13 puntos entre 2006 y 2016, reducción que a nivel nacional es de sólo 8 puntos. En matemática para ese mismo curso la caída es de 21 puntos, quedando todavía, eso sí, una diferencia de 56 puntos por superar.

Para el seremi de Educación Sergio Camus, esta mayor disminución a nivel regional de la distancia entre los sectores más ricos y los más vulnerables, se explica a partir de la inversión SEP que en la Región es mayor a la de otras zonas y a las acciones de liderazgo directivo emprendidas en la zona, entre otros factores.

La tendencia a rebajar la brecha se replica en comprensión lectora en la evaluación de comprensión lectora, donde se produce una caída de 25 puntos, pero que no satisface al Mineduc, pues se produce a costa de una importante baja en el nivel de evaluación de los sectores más acomodados. Si en 2006, el grupo alto tenía una evaluación de 309 puntos promedio, en 2016, ésta sólo fue de 278 y uno de los factores que impulsó esta caída fue la irrupción de los llamado "4G". 

Queda en evidencia en segundo medio, donde se produce una caída de 7 puntos durante la última década, asociada fundamentalmente al grupo de los hombres que presenta una mayor vinculación con el uso de la tecnología. 

Mujeres suben

En términos de género, los resultados muestran también aspectos interesantes. En comprensión lectora de 4to y 6to básico, las niñas están por encima de los 10 puntos de diferencia en relación a los niños, una distancia que ha sido permanente en la última década.

En cambio, en el caso de matemática, si bien ellas habían estado históricamente por debajo del puntaje de los niños, esta vez la situación se iguala, lo que implica un avance importante que es necesario replicar en otros niveles y áreas, declara el director de la macrozona centro sur de la Agencia de Calidad de la Educación, Gino Cortez.

"Esta diferencia en países de la Ocde no existe, por lo tanto, es muy importante avanzar en esa línea".

Los 4G

Frente a lo ocurrido con los alumnos que están permanentemente utilizando su smartphone en clases, la preocupación de parte del Mineduc, a través de la agencia, llevó a realizar un estudio que permitió establecer algunos resultados que muestran que son los niños los que tienen mayor afición al uso del celular, los que gustan más del uso de videojuegos, lo que los ha alejado en el uso de su tiempo libre de la lectura. En cambio, las niñas en un 74% leen por iniciativa propia y en un 56% conversar sobre libros (ver gráfica con resultados).

Para Cortez el desafío es comprender a las nuevas generaciones de estudiantes, que hoy la Agencia de Calidad denomina 4G para utilizar la tecnología en favor de los aprendizajes. Hoy los estudiantes, nativos digitales, tienen la capacidad de poner atención a múltiples tareas en un corto espacio de tiempo. Lejos de satanizar la tecnología, argumenta, es necesario buscar formas de utilizarla en favor del conocimiento. 

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