En lo que va corrido del año han ocurrido cinco, dos de ellas de origen laboral. Seremi de Salud fiscaliza permisos. 

 

Ximena Valenzuela Cifuentes 
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Los trabajadores temporales del sector agrícola son altamente vulnerables a la intoxicación por plaguicidas. Síntomas como dolor abdominal, náuseas, mareos, dolor de cabeza, vómitos, visión borrosa, sudoración e irritación de la piel son los principales signos de que algo anda mal. 

Las intoxicaciones no son menores, sobre todo, al constatar que en 2016 hubo 38 casos a nivel regional, 19 más que los registrados en 2015 de las cuales 16% tuvo origen laboral, pero menor a los 116 que se contabilizaron en 2014, donde 29 fueron relacionadas con el trabajo. 

De los casos ocurridos el año pasado, que fueron pesquisados por las áreas de Salud Ocupacional y Epidemiología de la Seremi de Salud, sumado a los servicios de urgencia hospitalarios, el 60% se concentró en la provincia de Ñuble; 32% en Bío Bío y el 8% en la provincia de Concepción, mientras que en Arauco no hubo hechos similares. 

Y, en lo que va corrido del año, se han presentado cinco intoxicaciones agudas por plaguicidas, dos de ellas de origen laboral. 

Ante el complicado panorama, la Seremi de Salud realizó 47 fiscalizaciones el año pasado, que derivaron en cinco sumarios sanitarios. 

El seremi de Salud, Mauricio Careaga, afirmó que buscando preservar la salud de los trabajadores implementaron vigilancia sobre diversos protocolos de salud ocupacional. "En el ámbito específico de plaguicidas, se fiscaliza la empresa que aplica los productos, los predios donde se emplean, realizando vigilancia a los trabajadores que manejan los productos; verificando el control biológico de los trabajadores, y el cumplimiento de la normativa general", explicó. 

La Seremi además fiscaliza que todo plaguicida cuente con registro sanitario de comercialización y autorización para la aplicación, debido a su potencial de generar daño genético.

Perfil de casos

La cifra de 2016 se desagrega en 12 casos individuales y cinco brotes, que involucraron un total de 26 personas. El 63% de los casos corresponden a mujeres (24) y 37% a hombres (14); concentrándose fundamentalmente en edades productivas, con peak entre los 31 y 60 años (66%), adultos jóvenes de 19 a 30 años (24%), además de un 8% de casos entre personas de 61 años y más, y un 2% en personas entre 6 y 18 años.

El tipo de plaguicida involucrado en las intoxicaciones agudas corresponde a insecticida (76%), seguido por fungicida (16%), origen desconocido (5%) y herbicida (3%). En ese contexto las intoxicaciones involucraron plaguicidas catalogados como poco peligrosos (45%), muy peligrosos (39%), moderadamente peligrosos (13%) y normalmente sin peligro (3%).

Se verificó que un 71% de las intoxicaciones agudas correspondió a intoxicaciones de origen laboral, seguido de un 18% de índole no laboral, mientras que un 11% corresponde a intoxicaciones de tipo voluntario (autolisis).

"Se puede concluir que existe una alta concentración de casos de intoxicaciones agudas en el ámbito laboral, con predominio en provincias de carácter agropecuario, como son Ñuble y Bío Bío; y por aplicación de plaguicidas tipo insecticidas", aseveró la encargada del sub departamento de Salud Ocupacional de la Seremi de Salud, Sonia Almeyda.

La profesional agregó que "la gran mayoría de los casos correspondieron a casos insertos en brotes, por lo cual como red se debe reforzar la fiscalización a lugares de trabajo donde dichos plaguicidas se aplican, involucrar a los organismos administradores en la capacitación y formación de aplicadores y empresas involucradas, con el objetivo de disminuir dichos casos, incentivando el cumplimiento de procedimientos de trabajo seguro, en el manejo, manipulación, almacenamiento y aplicación de los productos químicos". 

El presente año se registran cinco casos de intoxicación aguda por plaguicidas, tres no laborales. Tres casos radican en Ñuble y dos en Concepción.