Recomendó volver a mirar al río, generar emprendimientos en su borde, hacerlo navegable y mejorar el transporte público, de tal manera, que sea sostenible ambientalmente y que entregue un mejor servicio.
Recomendó volver a mirar al río, generar emprendimientos en su borde, hacerlo navegable y mejorar el transporte público, de tal manera, que sea sostenible ambientalmente y que entregue un mejor servicio.
Ximena Valenzuela Cifuentes
ximena.valenzuela@diarioconcepcion.cl
El talento de Luis Roberto Durán, arquitecto y urbanista colombiano, con más de 15 años de experiencia es innegable.
Su trabajo abarca desde la arquitectura mediana y de alta complejidad, en proyectos nacionales e internacionales, que lo han llevado a desempeñarse en los Emiratos Árabes Unidos y en Arabia Saudita, por nombrar algunos, pues en su labor ha visitado más de una docena de países estudiando las edificaciones y el desarrollo urbano particular de cada zona.
El profesional dictó la clase magistral Estrategias de Innovación, Mega Tendencias y Desing Thinker para los alumnos de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía de la Universidad de Concepción donde de manera bastante gráfica mostró parte de su trabajo y los desafíos del mundo de la arquitectura.
Destacó el trabajo que se hace a nivel internacional en el desarrollo de las ciudades. "Por ejemplo, se están haciendo ciudades en las que no se maneja dinero, otras ciudades con conceptos biométricos, implementando nanotecnología con materiales inteligentes porque no se trabaja como lo estamos haciendo nosotros, apagando el fuego en emergencias, no es el problema de hoy sino el de mañana", dijo.
Tras un recorrido por Concepción, Durán calificó a la capital regional como "una ciudad con todas las oportunidades", principalmente, en áreas específicas como la movilidad responsable o sostenible y frente al territorio natural.
En el primer ámbito, Durán afirmó que lo ideal es que Concepción cuente con un transporte público sostenible. "Hay que ver cómo hacemos para vincular el transporte público, de tal manera, que el servicio no sea a través del pago de un ticket (boleto), sino por tarjetas integradas que permitan usar de manera multimodal el transporte".
Aseveró que el transporte público se puede activar, siempre y cuando, las decisiones se encaminen, por ejemplo, a que funcionen horas más tarde. "Evitar que se formen atochamientos en momentos en que los conductores se están peleando por un pasajero, cosa que no sucedería si estos pasaran a tener un sueldo.
Además, aseveró que para que el transporte sea sostenible se podría pensar, incluso, en abandonar las micros a gasolina y cambiarlas por aquellas que cuentan con un sistema eléctrico.
Río y turismo van juntos
En cuanto al uso de recursos naturales, el arquitecto, que por más de cinco años estuvo radicado en Medio Oriente, afirmó que la ciudad tiene la oportunidad de revitalizar su economía a través del río Bío Bío, "que la ciudad lo vuelva a mirar y saque provecho de él. No darle la espalda al río, no considerarlo simplemente como un lugar para que se vayan los desechos ni para cruzar a San Pedro de la Paz".
Detalló que Concepción podría generar una nueva economía al mirar al río, "ver cómo podemos vincular el desarrollo de una costanera con las poblaciones cercanas del Gran Concepción y pensar a que se de un proyecto de navegabilidad, que se realicen festivales en su borde o que algún otro tipo de industrias se instale ahí".
Las posibilidades son amplias, según Durán, pues podría desarrollarse una gran economía turística, aprovechando los meses de verano en que los estudiantes no están en la zona y la ciudad queda vacía, sin atractivo alguno. "Sin duda, la manera de revitalizarla es desarrollar el turismo".
Los cambios antes enunciados serían sólo el principio para que Concepción se vaya transformando en una ciudad sostenible, ya que, a su juicio, a la gente le toma mucho tiempo adoptar cambios, sobre todo, en temas de movilidad".
Sin embargo, explicó Durán cuando se adaptan a los cambios y conocen sus ventajas se les hace cómodo usar una tarjeta para diferentes modos de transporte y, lo mismo sucede cuando tienen nuevos espacios públicos, aumenta el indicador de uso de estos. "Cuando podemos disfrutar de áreas naturales como el río y de nuevos espacios que ahora no tengo, cuando tengo nuevas economías ese es el principio de otros desarrollos económicos que pueden proyectar la ciudad a lugares hoy desconocidos como el turismo".
El especialista comentó que en su país natal le recomendaron conocer la desembocadura de Talcahuano, pero que esa información sólo se da de boca en boca, pues en los paquetes turísticos o en la información que entregan en los aviones no mencionan dichos lugares. "No tienen información, por ejemplo, que diga vaya a Talcahuano a disfrutar de un festival o algo una actividad, sino que el turismo está vinculado al área educacional o al turismo de negocios", criticó.
Cambios necesarios
La visión internacional de desarrollo de proyectos que tiene Luis Roberto Durán le permiten asegurar que al país y la Región le falta mejorar su capacidad de gestión desde la gobernanza, en conjunto con la empresa privada y las academias. Destacó que el trabajo a largo plazo implica que los diferentes gobiernos sean capaces de proyectarse más allá de sus administraciones para lograr cambios que favorezcan a la gente y el desarrollo de las ciudades de manera más sustentable.
"Recomendaría aumentar la capacidad de gestión de manera transversal y eso es lo que se llama inteligencia colaborativa, implica trabajar uniendo todos los ámbitos del conocimiento, preguntarse quién es el nuevo que se sabe de economía, el nuevo en tecnología, el nuevo en gestión, el nuevo en políticas públicas, el nuevo desarrollo en territorio urbano. Lo que permitiría desarrollar de mejor forma los proyectos".
Reconoció que los proyectos en Medio Oriente no tienen los inconvenientes económicos que existen en Latinoamérica. "Allá hay una danza de millones, no tienen el problema de acá de lo bueno, bonito y barato, ellos promueven lo mejor de lo mejor", pero afirmó que las oportunidades están y que la capacidad de gestión, unido al trabajo colaborativo y al cuidado de los recursos naturales pueden generar nuevas economías que revitalicen por completo cualquier ciudad.