El convencional realizó un balance del trabajo hecho en estos meses. Además, se refirió al proceso de difusión del borrador que se realizará en las próximas semanas.
Una etapa clave comenzó en la Convención Constitucional con un borrador de lo que podría ser la nueva carta magna que regirá los destinos de nuestro país.
El proceso no ha estado exento de dificultades, pero ahora inicia un periodo importante, el de difusión. Sobre el proceso, el convencional del Biobío, Bastián Labbé (MSC), dijo estar conforme ya que “involucró a las diferentes sensibilidades políticas o diferentes sectores. De hecho, la mayor cantidad normas aprobadas venían de colectivos que, podríamos decir, eran parte del centro de la Convención. A nivel de correlación de fuerzas, Colectivo Socialista, INN y Frente Amplio. Eso quiere decir que los acuerdos que se lograron fueron transversales. Hay conformidad, porque si bien se llegó a acuerdos también fue sin perder las agendas y los programas”.
-¿Cómo van a comunicar el contenido del borrador?
-Estamos trabajando en jornadas de difusión e información, de apropiación del texto constitucional. Este fin de semana 27, 28 y 29 de mayo se realizarán las Jornadas “Hablemos de un Chile Justo” que está siendo levantada desde la Comisión de Participación Popular, Secretaría y también la Convención Constitucional, que permite generar encuentros para explicar, informar sobre el borrador, en cuanto a los avances que existe en materia jurídica, concretamente cómo se ha avanzado en esta Constitución respecto a la actual y también en los desafíos. Entendemos que este proceso también tiene desafíos para el futuro, particularmente en su implementación, en su ejecución.
-¿Qué espera de las jornadas?
-Las Jornadas Nacionales de Deliberación son en todo el país. Estamos coordinando con diferentes convencionales por región. Entonces, esperamos que esa participación sea transversal de parte de la sociedad civil. También que las instituciones públicas, el Gore, municipios, universidades públicas que siempre han estado a disposición de este proceso, sigan confirmando el trabajo educativo tan necesario en esta etapa informativa , además, poder aclarar dudas. Fue el tenor, al menos, en la salida a Antofagasta. Mencionarle que lo que sentíamos de la población eran dudas, preguntas que podíamos ir resolviendo en el momento. Es una oportunidad tremenda que se puede dar este fin de semana, que se puede extender otros días.
-Convencionales de derecha hablaron que el viaje a Antofagasta fue un paseo de curso. ¿Cómo ven esos cuestionamientos? ¿Cómo cree que puede afectar en la participación de la ciudadanía en este proceso?
-Estoy absolutamente en desacuerdo con esas declaraciones. De paseo, no tuvo nada. De hecho, hubo comisiones y comitivas por región para desplegarse territorialmente. Tuvimos cinco o seis actividades. Nos reunimos con organizaciones sociales y sindicales, trabajadores, mineros, empresarios, estudiantes, vecinos y vecinas. Incluso fuimos una de las tomas más grande que existe en Antofagasta. Estuvimos dialogando en torno a las normas constitucionales, solamente las comitivas que estuvieron en terreno, pero también hubo un trabajo de comisiones donde se recibieron audiencias públicas. Fueron autoridades a conversar con los convencionales para ir trabajando justamente en el texto final. Entonces, estas declaraciones no tienen ningún sentido, el trabajo se realizó de manera responsable, profesional, de cara a la ciudadanía. También destacar el gran compromiso que tuvieron las autoridades locales, especialmente el gobernador. Allá nos decían que las autoridades públicas iban muy poco al norte, en Antofagasta casi no iban a comunidades más pequeñas, a Tocopilla, a Calama, a Taltal, a Mejillones, donde también terminamos el último pleno.
-¿Qué esperan de los convencionales de derecha, que por ejemplo, no se sumaron a esta iniciativa?
-Creo que independiente del sector político. Las normas o el borrador del texto constitucional se construyó en un espacio de democracia. Hubo muchas posiciones, incluso mías y de otros convencionales, que no quedaron en el borrador del texto constitucional. Pero hay una mayoría que planteó un tema y se aprobaron normas con esa mayoría, con un bloque que genera el consenso, que genera la deliberación. Creo que cualquier convencional, independiente de la sensibilidad política fue parte de este proceso constituyente. Alejarse o abstraerse creo que no es la mejor solución o no es la mejor forma. Evidentemente lo que uno espera de cualquier convencional, que fue parte de la Convención Constitucional, que participó y aceptó las reglas que se dio, debería asumir que fue parte del ejercicio democrático y debería informar objetivamente lo que se aprobó. Creo que las normas que se aprobaron, a partir de un ejercicio democrático, del deliberativo independiente, la visión particular que cada uno tenga es representativo de una mayoría que se manifestó.