La UDI apostó por un Van Rysselberghe mientras en RN dicen que no se perpetuarán en los cargos. Evópoli asegura que se requieren recursos para levantar liderazgos y el PRI tiene su lucha interna.
La UDI apostó por un Van Rysselberghe mientras en RN dicen que no se perpetuarán en los cargos. Evópoli asegura que se requieren recursos para levantar liderazgos y el PRI tiene su lucha interna.
Maximiliano Alarcón González
maximiliano.alarcon@diarioconcepcion.cl
El nacimiento de Chile Vamos, conglomerado que reúne a la UDI, Renovación Nacional, el PRI y Evópoli, se basó en la necesidad de la derecha de reagruparse e intentar revertir la desaprobación en la que se han visto sumidos desde que se conocen los casos de corrupción que involucran a varios personajes de la política.
El hecho de haber eliminado el nombre de Alianza por Chile del pacto también se debió a la inclusión de dos nuevos partidos: Evópoli y el PRI, compuestos principalmente por ex integrantes de RN y la Democracia Cristiana, respectivamente.
En la Región del Bío Bío este proceso de reestructuración ha sido lento. Más allá de la coordinación por las elecciones municipales, no han salido resoluciones en otros temas dentro del pacto, asimismo, nunca se realizó el lanzamiento oficial que tenían acordado. Con todo esto, el desafío que tiene el conjunto de partidos es proponer algo nuevo, tanto a nivel de rostros e ideas.
Recientemente, en el proceso de definición de los candidatos a elecciones municipales, Chile Vamos tuvo una instancia de mostrar liderazgos nuevos. Los partidos que recién se integran al conglomerado pudieron llevar a sus cartas, pero no tuvieron mayor suerte.
En el caso del PRI además de la derrota electoral en las primarias el mal momento se extendió a las semanas posteriores. Marcelo Mella, quien ocupaba el cargo de coordinador provincial del PRI en Concepción y Arauco, dejó su cargo a disposición, debido a que sintió que los candidatos propuestos por su colectividad obtuvieran el respaldo necesario. En todo caso, la acusación de Mella no apunta al conglomerado, sino que a la dirección nacional de su partido, a quien culpa de haber perdido la oportunidad de "potenciar candidatos con proyección", como es el caso de Luis Ceballos en Lota, citó el dirigente, quien desistió de participar con el PRI y finalmente estará en las municipales por Amplitud.
Mella dice: "la apuesta nuestra siempre fue en sintonía con la ciudadanía, de darle un aire distinto a lo que se hacía en la política contingente. Lamentablemente, hoy seguimos la misma lucha, tratando de buscar rostros verdaderamentenuevos para la representación futura. Desde el PRI sigo manifestando que vamos a tener que enfrentar una gran lucha, dado que lo que seguimos buscando no es diferente a lo que tratamos de cambiar, eso me lleva nuevamente a esperar los tiempos prudentes para poder decir que necesitamos realmente la renovación de la política, no a aquellos cuervos disfrazados de blancas palomas".
Para el dirigente del PRI, la política siempre es dinámica y busca nuevos liderazgos. Es un camino pedregoso, afirma, pero la experiencia de estar en el conglomerado no le ha resultado negativa: "Chile Vamos siempre tuvo espacios suficientes para las aspiraciones propias de cada partido, lo que ha sucedido aquí es que los liderazgos nacionales no fueron capaces de potenciar ese espacio que le correspondía al PRI. A nivel nacional, nuestra propia directiva, dejó de ser un partido regionalista, está centralizado y las decisiones las están tomando ellos en Santiago", indicó.
La visión desde Evópoli, a cargo de su presidenta regional, Francesca Parodi, también viene desde una nueva experiencia en política, aunque la dirigenta tuvo un pasado en la UDI durante la campaña presidencial de Joaquín Lavín en 2001, periplo que tuvo su fin en 2003.
Parodi indicó que nivel de candidaturas actualmente "los rostros conocidos son la solución más fácil. El tema de que sea conocido puede adelantar una carrera, si no es conocido eso requiere de recursos económicos y de tiempo. Finalmente, son las soluciones más fáciles, en perjuicio de personas que puedan tener nuevas ideas o proyectos innovadores".
Mientras que a nivel dirigencial, Parodi sostiene que el estar en estos cargos es una herramienta que puede servir para impulsar una futura elección popular. Por su parte, desde Evópoli dice que su rol no es posicionarse a sí misma, sino que a Evópoli: "las ideas que tenemos, la nueva forma de hacer política, más ciudadana, más de ideas y más de debate", precisó.
Los con más tradición
La UDI y RN se conocen desde hace bastante años desde cerca. En el Bío Bío están dirigidos por viejos conocidos de hecho: Sergio Bobadilla y Frank Sauerbaum, respectivamente, ambos ex diputados.
En Concepción el ganador de las primarias fue Cristián Van Rysselberghe, que si bien es un candidato joven, viene de una larga historia política que involucra a su padre, abuelos y sus hermanos actualmente parlamentarios. Pero en las municipales de 2012, el gremialismo apostó por un rostro nuevo: Emilio Armstrong, quien sin tener elecciones en el cuerpo anteriormente, fue a la disputa que finalmente perdió contra el alcalde Álvaro Ortiz, pero sin obtener malos resultados, lo que se demuestra con su cargo que hoy tiene en el Consejo Regional.
Armstrong que antes de ser candidato a alcalde en 2012 trabajaba en las áreas más técnicas de la política, como en la reconstrucción tras el terremoto de 2010, cuenta que se le dio la oportunidad de competir por los motivos recién mencionados, lo que recuerda como un lindo desafío, el que le sirvió para seguir en otras elecciones.
Para Armstrong, la recepción ciudadana de las personas a la apuesta por una cara nueva fue positiva: "las personas lo tomaron de muy buena manera. Haber partido de cero y en menos de cuatro meses haber llegado a casi un 40% de los votos, demuestra el respaldo a la idea de tener a alguien nuevo en la política", indicó.
Armstrong agregó que "es malo generalizar, decir que porque una persona es nueva va a ser buena y una antigua hay que sacarla. Por mi parte, creo que las personas la tomaron de manera muy positiva".
En tanto, Renovación Nacional desde hace unos años vive una nueva dirigencia que buscaba cambios, a cargo de Frank Sauerbaum, que se hizo con el cargo luego de perder en las parlamentarias. De la directiva anterior el único que se mantiene es Gabriel Torres, aunque Sauerbaum dice que es un trabajo que requiere tiempo, para que los jóvenes adquieran experiencia, pero de todas formas, señala que cuando se realicen las elecciones internas en diciembre se dará espacios a nuevas personas. "Aquí nadie tiene intenciones de perpetuarse. La directiva anterior duró ocho años, nosotros llevamos sólo dos. Nuestra intención es ir modificando nuestros cuadros, porque nos interesa darle espacio a las nuevas generaciones", dice el ex congresista. En su trabajo de renovación interna, señala que se ha dado la oportunidad a cualquiera que lo requiera al interior del partido, por lo mismo agrega que con este método ya lograron definir al 98% de sus candidatos a concejales.
Respecto a que ahora el candidato en Concepción es otro hermano de la familia Van Rysselberghe, señala que se debe a que son liderazgos que se buscan en tiempos cortos: "cuando tienes que generar un liderazgo es algo que requiere mucho tiempo. La gente pese a que dice que necesita rostros nuevos, tampoco confía en alguien que no ha visto nunca. Cristián Van Rysselberghe, compitió en igualdad de condiciones con todos los demás, no es una designación a dedo, no es un pecado el apellido que tiene", explicó.