Tener tu casa preparada para el verano es esencial. Por ello, conoce por qué instalar una piscina estructural y un aire acondicionado te conviene.
Los días de verano se aproximan y con ellos el mejor tiempo para disfrutar de actividades al aire libre en compañía de familiares y amigos. En este escenario, ¡qué mejor idea para tus momentos de relajo que instalar una piscina estructural en casa!
Si te encanta la idea, aquí te contamos cuáles son los tipos de piscinas estructurales que encontrarás a la venta, la forma que más te conviene en función del espacio del que disponga y los materiales más durables, considerando las altas temperaturas que se avecinan.
Una piscina estructural clásica cuenta con un armazón rígido que le aporta estabilidad y define su forma. Entre las ventajas de estas piscinas destaca el que, al estar hechas para ensamblarse, son fáciles de desmontar, trasladar y almacenar al término del verano.
¿Qué modelos existen? Pues destacan los siguientes:
1. Piscina redonda
Al ocupar menos espacio, una piscina estructural con esta forma es recomendable para el uso doméstico, sobre todo en familias con niños. Estas suelen incluir un filtro y un parche de reparación.
2. Piscina rectangular
Esta es la forma perfecta si dispones de una superficie de gran tamaño en el jardín o terraza. Con ella tendrás espacio suficiente para realizar las primeras prácticas de nado junto a tus hijos, además de ser ideal para el esparcimiento con amigos.
Este modelo destaca porque puede usarse como spa. Además, suele estar equipada con un filtro, una escalera y un dispensador ChemConnect.
3. Piscina cuadrada
Una piscina estructural clásica cuadrada es una gran alternativa para aprovechar espacios pequeños o irregulares, pudiendo adaptarse de mejor manera a las dimensiones del terreno.
Es ideal si tienes una familia de tamaño mediano (máximo 3 a 4 niños), pues tienen lugar suficiente para jugar y bañarse sin problemas.
Ahora que ya conoces los tipos de piscinas, debes considerar sus materiales. Una piscina estructural de buena calidad, capaz de soportar las altas temperaturas del verano, podría tener una construcción como la siguiente: estructura de acero en un 60% y de PVC en un 33,3%, PP en un 4% y poliéster en un 1,4%.
Si bien las piscinas de lona con estructura a base de acero inoxidable suelen requerir mayor mantenimiento y tiempo de instalación que otras opciones, también es verdad que entregan una mayor resistencia y durabilidad frente a posibles pinchazos, altas temperaturas y fenómenos como la corrosión, pudiendo permanecer instaladas durante meses sin sufrir daños.
Con temperaturas que superan los 30 °C en el verano, es necesario que cuentes con complementos, tanto dentro como fuera de tu hogar. Por ello, un aire acondicionado para climatizar tus espacios, te dará la frescura necesaria y, además, creará un oasis en tu hogar.
¡Ya lo sabes! Ambos productos, sin duda, serán la solución perfecta para combatir el calor y sentirte de vacaciones en un destino paradisíaco o darles a tus hijos un espacio de diversión seguro sin tener que salir de casa.