DR. DOMINIK SCHLEICHER
Profesor Asociado e Investigador CATA,
Departamento de Astronomía UdeC
En varias ocasiones se habla sobre el tema de la colaboración internacional, aspecto que forma parte de la evaluación de proyectos científicos, de programas de pre y postgrado; además de jugar un rol relevante en la acreditación de las universidades.
No obstante, es útil reflejar en detalle cual es la importancia de la colaboración internacional, particularmente en el contexto de Chile y también en el de la post-pandemia. Actualmente, al retomar la posibilidad de viajar, se abren las posibilidades de conocer los trabajos realizados por otros astrónomos en los últimos años; profundizar respecto a desarrollos e innovaciones, y también mejorar la educación de los estudiantes que participan en proyectos de ciencias. Todo gracias a las visitas con enfoque en la colaboración científica, donde pueden conocer nuevas herramientas y formar sus propios contactos internacionales, formando redes de colaboración que les pueden servir en su vida profesional.
Hace poco, tuve la oportunidad de visitar la Universidad de Heidelberg en Alemania por unas semanas, junto a dos alumnos que me acompañaron para participar en proyectos conjuntos. La experiencia fue muy buena y conocimos herramientas de machine learning que nos inspiraron a impulsar los trabajos que hoy estamos desarrollando.
Una de estas herramientas, por ejemplo, nos sirve para entender de mejor forma el resultado del colapso gravitacional de las estrellas y la formación de agujeros negros supermasivos.
Mediante estas instancias también llegamos a ideas que nos pueden servir más al largo plazo, y que en parte ya las incorporamos en nuevas postulaciones. La velocidad a la que se desarrollan estas herramientas es impresionante, y será importante estar al día con respecto a las innovaciones en la ciencia, en especial sobre las que tienen el potencial de cambiar profundamente la forma del trabajo y también el tipo de resultados que se pueden producir.
De hecho, visitas anteriores nos inspiraron a realizar inversiones en tecnología en Chile. Por ejemplo, el grupo del profesor Rainer Spurzem en la Universidad de Heidelberg, y el Dr. Philipp Grete, de la Universidad de Hamburgo, nos enseñó a cómo utilizar las herramientas para realizar simulaciones de fluidos astrofísicos, utilizando códigos informáticos como K-ATHENA. En base a este intercambio de conocimiento, logramos realizar una postulación exitosa al programa Quimal-ANID en Chile, para así crear la base para trabajar con estos instrumentos.
El intercambio y la visita en otros lugares puede inspirar muchas ideas e innovaciones, que pueden llevar a nuevas oportunidades o caminos de investigación. Durante la pandemia pudimos mantener estos contactos vía internet; hoy, llevamos estas colaboraciones a otros niveles mediante visitas personales y con grandes opciones de tener buenos resultados, tanto de la experiencia personal como en futuros trabajos conjuntos.