Editorial

Licencias médicas impagas: el daño colateral de la pandemia

Situaciones como estas no ayudan a disminuir las cifras de licencias médicas en la fuerza laboral de la Región. El hecho de mantener una licencia médica impaga golpea directamente los ingresos de una familia y complica cualquier tipo de problema por salud mental, u otro diagnóstico, por el que esté pasando un trabajador.

Por: Equipo Digital 31 de Enero 2023
Fotografía: Contexto

Cerca de un millón de licencias médicas se emitieron en la Región del Biobío durante el 2022. La cifra, que representa un aumento de un 17,8% en relación al 2021, muestra la realidad por la que actualmente está pasando el mundo laboral de la zona. Esto según datos entregados por el Informe anual de emisores de Licencias Médicas Electrónicas 2022 que elabora la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso).

La cifra local no se distancia del panorama nacional, y es que, el número de Licencias Médicas Electrónicas (LME) emitidas y pronunciadas a nivel país alcanza a 9.283.961, lo que significó un aumento de 14,7% respecto al año pasado.

El escenario generado por la pandemia es uno de los principales factores que identifican desde la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), argumentando que la inestabilidad laboral, junto con el regreso de la presencialidad, ha generado perjuicios en la salud mental de los trabajadores.

En base a los datos entregados por el informe de Suseso, más de dos millones de las licencias médicas emitidas a nivel nacional corresponden a trastornos metales, siendo el diagnóstico más reiterado en los documentos médicos pronunciados durante el año pasado.

Uno de los problemas acusa la CUT, con el aumento en la emisión de licencias médicas, es la cantidad de documentos que aún se encuentran impagos, generando un preocupación adicional en los trabajadores, ya que temen perder su trabajo por el uso de una baja médica o deben volver a sus labores porque no le pagan su permiso.

“La gran mayoría de las licencias emitidas no están siendo pagadas. Por lo tanto, nos enfrentamos a una situación de doble efecto, ya que algunos temen a ser despedidos por el uso de las licencias y otros tienen que volver por el no pago de estos documentos”, señaló, Paola Zúñiga, presidenta de la CUT Provincial Concepción.

Situaciones como estas no ayudan a disminuir las cifras de licencias médicas en la fuerza laboral de la Región. El hecho de mantener una licencia médica impaga golpea directamente los ingresos de una familia y complica cualquier tipo de problema por salud mental, u otro diagnóstico, por el que esté pasando un trabajador o trabajadora.

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