El diputado por la Región del Bío Bío, Enrique Van Rysselberghe (UDI), celebró que durante la tramitación de la Ley de Presupuestos 2021 se haya aprobado una indicación de su autoría, que prohíbe a los colegios particulares del país exigirle a los apoderados que adquieran textos escolares de una determinada editorial, permitiendo así que puedan acceder a los libros del Ministerio de Educación al valor que defina la propia cartera.
La propuesta, explicó el parlamentario, surge a partir del alto costo que deben desembolsar los padres y apoderados para adquirir una serie de textos de una determinada editorial que suelen exigir los establecimientos particulares, debiendo gastar entre $25.000 y $35.000 por cada libro, impactando considerablemente los ingresos de las familias chilenas, en especial las de clase media.
“Aún estamos en medio de una de las peores emergencias sanitarias y económicas de las últimas décadas, y por tanto debemos preocuparnos de que nadie termine pagando los costos de esta crisis, en especial los niños y adolescentes. Y una forma de hacerlo es tratando de disminuir al mínimo los gastos que suelen producirse al inicio de cada año escolar”, sostuvo Van Rysselberghe.
El parlamentario recordó que los padres y apoderados “tienen que invertir en matrícula, mensualidades, uniforme, útiles escolares y transporte, así que si podemos alivianar de alguna manera sus gastos, lo vamos a hacer”.
En esa línea, el diputado gremialista recordó que “no nos debemos olvidar que muchos de los establecimientos que hoy son particulares antes eran particular subvencionados, y por lo tanto esas comunidades escolares están compuestas principalmente por familias de clase media que se han visto muy afectadas con la pandemia”.
“Por eso es que decidimos promover esta indicación, que afortunadamente fue aprobada ayer en la Cámara de Diputados, porque como Estado tenemos que ayudar a esas familias que con mucho esfuerzo van a mantener a sus hijos en los mismos establecimientos”, cerró Van Rysselberghe.