En una bajísima presentación, el conjunto dirigido por Jaime García fue superado en todas las facetas del juego por el local y derrochó la opción de quedar como exclusivo puntero de la Primera División.
La caída de Universidad Católica en el clásico ante la U, había dirigido todas las miradas al duelo que protagonizaban Deportes Iquique y Huachipato, en el estadio Tierra de Campeones. Ahí, frente al colista absoluto del torneo, el equipo que no había ganado un solo encuentro en la temporada, los acereros tenían la inmejorable opción de quedar como exclusivos líderes del torneo de Primera División.
Sin embargo, lo que debía ser un aliciente extra, terminó siendo una carga para el equipo dirigido por Jaime García, que estuvo en cuerpo pero no en alma en la cancha iquiqueña, y fue derrotado con todos los merecimientos por los “Dragones Celestes”, que se impusieron por un categórico 3-0.
Partido en falso de los siderúrgicos, que no se encontraron nunca en el campo de juego, dejando en claro que la regularidad está lejos de echar raíces en el conjunto de Talcahuano, que se mantuvo en el quinto lugar con 17 puntos.
Que no se mal entienda, Huachipato no se guardó nada en el norte. Sabiendo la posibilidad de tomar la punta, García se la jugó con Briceño, Martínez y Altamirano en delantera, confiando en que el potente tridente sería imparable para una defensa que había recibido 10 goles en sus tres duelos de local.
Pero Fernando Díaz es un técnico ducho y pobló esa zona donde Ferreyra, Gómez y el español, Saborit, fueron amos y señores. En el otro sector, el trío que sí se encontró a cabalidad fue el de Dávila, Puch y Ramos, que muy bien acompañados por Fuentes y Pino, causó estragos en la zaga acerera.
En los 13’ una pelota perdida por Villanueva en la salida, propició el quite de Fuentes que se la dejó a Puch. El exseleccionado chileno acumuló marcas y cedió para Álvaro Ramos, que ingresando por la izquierda del área sacó un remate junto al palo que sorprendió a Odriozola. Pudo aumentar el local en los 36’, pero Dávila se lo perdió en la boca del arco.
En el complemento, García dispuso el ingreso de Brea y Gutiérrez, que dieron más movilidad al ataque, pero sin profundidad. Por contrapartida, fue Iquique el que aumentó a los 76″ a través de Saborit, que tras un córner mal despejado por Odriozola, apareció para empujarla en el segundo palo.
Partido definido, pese a que restaban aun unos 20 minutos. La guinda de la torta para Iquique llegó por intermedio de Dávila, que merecía su gol y lo concretó en los 84″ con un disparo al ángulo desde fuera del área, que cerró el marcador y le dio su primer triunfo a los nortinos, que aunque siguen últimos, ahora solo quedaron a un punto de Everton y Unión Española.