Antonio marcó su segundo gol del año y siempre sirvió para que Fernández Vial gane. A sus 24 años siente que al fin tiene los minutos que quisiera y todo a solo 4 meses de ser padre.
Marcó en los triunfos sobre General Velásquez y Rengo y ambos con idéntica dedicatoria. Antonio Ramírez expresó que “todos los goles que vengan son para Teo, que nacerá en septiembre, y para su mamá Romina”. Sí, la destacada atleta Romina Mardones, que también trabaja con sus alumnos en Collao, a estas alturas la casa de ambos. Momento soñado para este muchacho que pensó retirarse y hoy es buena figura de Fernández Vial.
A sus 24 años asegura que “en este equipo hay varios que pasamos por lo mismo. Que no teníamos club o ni los minutos que uno quiere. Algunos entrenaban en el Sifup y yo estuve muy cerca de ir allá, pero decidí trabajar por cuenta propia, salía mucho a correr, me mantenía bien físicamente por si salía algo. Sí reconozco que pensé en retirarme, porque siempre tenía 12 o 15 minutos en la cancha y con eso no podía demostrar mucho”.
Y salió esto de Vial que le vino perfecto. “Al principio nos costó como equipo porque no nos conocíamos mucho, prácticamente todos nuevos, pero siempre mostramos esa garra y entrega que ahora también está llevando a buenos resultados. Se nos ve más cómodos, sabemos lo que puede hacer el compañero”, apuntó.
Lucen la segunda mejor defensa del campeonato con solo 7 goles en contra y Ramírez advierte que “ya se ve un estilo de Vial, que es lo que busca el profe Orellana. Un equipo que se entrega, que mete y se nota porque terminamos los partidos cansadísimos. Ese día contra Rengo (1-0) había compañeros que se tiraron en el suelo después del pitazo final. La gente lo reconoce y hay que mantenerlo”.
Pero tampoco es que este Vial sea solo meter y no tenga fútbol. No se gana solo con garra. El extremo aurinegro afirmó que “los últimos goles han salido de buenas jugadas colectivas, no de un pelotazo porque sí. Tratamos de salir rápido y Claudio Muñoz es el que empieza todo desde atrás, él maneja bien los tiempos. Buscamos ir rápido, atacar por las orillas y ahí es importante lo que podemos hacer los extremos. Me siento cómodo acá”.
Tanto que se está animando con el arco y marcó su segundo gol tras recibir un buen pivoteo de Huerta. Le quedó “chanchita” y fusiló con el alma. “Los goles y los triunfos dan confianza. Siento que me reencanté con el fútbol y este año puedo explotar. Eso es lo que me he planteado como objetivo”.
Rengo venía de 6 juegos sin perder y Vial lo superó con claridad. Ramírez destacó que “era un rival complicado, que venía de menos a más y también había eliminado a Curicó de Copa Chile. Pudimos hacer nuestro fútbol y ahora viene Valdivia, que es una final para nosotros si queremos pensar en cosas más grandes. Estos son los partidos que tienes que ganar”.
Será el sábado, a las 15.30 horas, en el Parque Municipal de Valdivia, frente a un cuadro que lleva los mismos 12 puntos que Vial, pero con dos juegos más.
“Tenemos esos partidos pendientes con Iberia y Concepción y, claro, si los ganamos nos meteríamos arriba, pero hay que pensar primero en el sábado, en Valdivia. Saldremos a ganarlo sí o sí y luego veremos para qué estamos, pero uno se ilusiona”, afirmó el “7” aurinegro.