El equipo de Orellana partió en desventaja por un error puntual, pero empató y buscó todo el segundo tiempo. Si hubo uno que quiso ganar fue el local, pero los puntos se fueron a Osorno en el minuto final.
Ni siquiera firmaba el empate, pero fue peor. En el primer minuto de tiempo agregado lo dejaron con las manos vacías. Fernández Vial remó de atrás y metió a Osorno en su arco durante todo el segundo tiempo y, pese a todo, cayó 2-1 con un buen gol de Uribe. No siempre hay premio para el que más busca, aunque en la asociación ofensiva y otras facetas del juego, la “Maquinita” sí tiene varias cosas que pulir.
Abrió la cuenta Diego Bielkiewicz, a los 4’, aprovechando que Àngel Gillard no rechazó una pelota en el área y esta se fue a la posición del argentino. Puntete y gol para uno que no te perdona.
Pero Gillard no se echó a morir y fue importante. Encaró, generó una buena opción que tapó Figueroa y a esa hay que sumar un centro por derecha que Yerald Pinilla no empalmó bien y se fue sobre el arco. Vial llegaba y llegaba por las bandas, Osorno estaba incómodo.
Gillard emparejó a los 45’ con muy buen cabezazo y el segundo tiempo fue a todo Vial, que pudo marcar otra vez a través de Ramírez y Matamala y hasta del capitán Muñoz que siempre gana arriba. Pero el gol lo hizo Uribe y Osorno se llevó el botín completo. Tarde amarga. Injusta.
Durante largos pasajes del encuentro, Vial hizo mucho daño por las bandas. Alternando buenas y malas, a veces un poco de individualismo, pero siempre buscando ser punzantes. Por la derecha intentó mucho Ricardo Fuenzalida y por el ala contraria, un poco más claro, el buen Alexander Concha, uno de los buenos descubrimientos de esta campaña. El zurdito llega siempre al fondo, es incisivo y también quiso juntarse a ratos con Canessa para romper la defensa osornina que sufrió y bastante. También es dueño de muchas pelotas paradas, una de las armas predilectas de Vial cuando cuesta asociarse.
Corría el primer minuto de tiempo agregado y daba la sensación de que Osorno pedía la hora, mientras Vial intentaba y chocaba una y otra vez con el portero, la defensa y todo lo que pusieran los Toros delante del arco. En eso cayó la primera contra y una de las pocas llegadas del cuadro visitante en todo el segundo tiempo. El balón quedó en pies de Leonardo Uribe, su remate fue tapado por Veloso y el volante insistió con zurdazo que Nery estuvo cerca de volver a frenar. Silencio en un Collao que alentaba con furia lo que parecía estar más cerca de Vial que de Osorno.
Vial tuvo cinco minutos furiosos, donde metió a Osorno en su arco, pero no pudo lograr esa cifra que marcara la real diferencia en el tanteador. Lo tuvo Simón Ramírez cundo enganchó para su pierna izquierda y su buen remate al arco fue sacado milagrosamente de cabeza por Luciano Meneses. Pero hubo una más clara: a los 88’ Ricardo Matamala se encuentra con un balón en plena área y obliga a un tapadón de Diego Figueroa para mantener lo que hasta entonces era empate. Los jugadores se tomaban la cabeza, no querían solo un punto. No sabían que lo peor de la tarde aún estaba por venir.
Hubo un par de jugadas donde la gente de Vial pidió penal. Tal vez desde el estadio se vio más de lo que fue, pero lo cierto es que ninguna de las entradas de los defensores osorninos estuvo ni cerca de ser falta. En el primer tiempo los vialinos pidieron una sobre Gillard, pero el defensor fue limpio al suelo. Lo mismo ocurrió a los 49’ con el “Rayo” Fuenzalida metiéndose al área , pero dejándose caer aparatosamente sin motivo. El árbitro no compró ninguna.