Abren la jornada de sábado como visitantes. Huachipato va por su cuarta victoria consecutiva que les permita seguir líderes del torneo. Una cosecha impensada pero real tiene a los acereros con campaña perfecta.
Aún así, el DT es cauto. “El buen arranque lo valoro más en cuanto al funcionamiento. Los puntos que obtuvimos los partidos anteriores no nos dan ninguna ventaja. Cada partido es una historia diferente. Lo dije desde el primer día, nosotros no miramos más allá de los tres puntos que vienen. La mentalidad es ganar el próximo partido y a final de año se verá para que alcanzó”, sostuvo Gustavo Álvarez.
El técnico acerero, desde su arribo, efectivamente ha adoptado la postura del “partido a partido”. ¿A qué se debe aquello? ¿Cómo nace esa idea de encarar la competencia? Álvarez explicó que “se trata de una forma de vivir, no de trabajar. Si uno mira muy para adelante, caes en la ansiedad y buscas un desenlace rápido acortando el tiempo. Si miras para atrás, te lamentas o disfrutas de cosas que ya pasaron. Y eso te desenfoca, porque lo único que puedes resolver es el hoy. Los objetivos que me pueda trazar de aquí a diciembre, me quitarán energía en Coquimbo. Si revisan mis declaraciones, en todos los equipos he dicho lo mismo. Y me ha tocado dirigir buscando salir campeón, para clasificar a una copa o salvar la categoría. No es un discurso, es una forma de trabajar y vivir que me parece coherente. Cualquier objetivo que nos fijemos a largo plazo será el final de una escalera, donde creo que la mejor forma de recorrerla es escalón por escalón. Ahí iremos seguro”.
Los “Piratas” tienen 4 puntos de 12 en juego y vienen de caer 2-0 a manos de Everton en un atractivo partido donde merecieron más. “Son un rival duro. No es cortesía, Coquimbo es un equipo batallador, ordenado, con pasajes de juego directo, muy intenso”, cerró el DT acerero.
