Portugal y el “Scratch” respondieron al favoritismo en Qatar, mientras Uruguay decepcionó igualando ante Corea y Suiza obtuvo un estrecho triunfo sobre Camerún.
Fue una jornada sin sorpresas la de ayer en Qatar. Los favoritos no pasaron grandes complicaciones para ganar sus partidos, mientras que los restantes encuentros entre equipos de nivel parejo, tuvieron un trámite pálido.
A primera hora, Suiza le ganó a Camerún por 1-0 en un deslucido partido, que fue el fiel reflejo de lo que juegan los europeos en cada Mundial: un equipo sólido desde lo defensivo y efectivo en ataque. Así, el gol de Embolo al 48’ definió todo y dejó con las manos vacías a los africanos.
Más tarde, Uruguay chocó ante Corea del Sur en un duelo donde los celestes asomaban como favoritos, pero defraudaron. Ofensivamente fue muy poco lo que generaron ante un elenco asiático que dio pocos espacios en la zaga. Suárez se vio lento y falto de ritmo, creándose los charrúas la ocasión más clara de gol al cierre con un tiro de Valverde al poste. Un 0-0 decepcionante.
Probablemente el mejor duelo de lo que va de torneo se jugó luego en el estadio 974, donde con Cristiano como principal referente, Portugal venció 3-2 a Ghana en un partido de ida y vuelta. El crack portugués hizo historia marcando por quinta Copa del Mundo seguida, en un duelo que casi acaba igualado por un grosero error del arquero europeo.
Finalmente, Brasil trabajó más de la cuenta para derrumbar el muro defensivo de Serbia, aunque terminó festejando por 2-0 gracias a los tantos de Richarlison. En el “Scratch” respondieron a las altas expectativas que habían sobre ellos, aunque quedaron preocupados por una lesión de Neymar en el tobillo. Así, la primera ronda de partidos en Qatar llegó a su fin ayer.