Se especuló con algunos nombres conocidos del medio local, pero finalmente el entrenador de Huachipato es argentino, viene de dirigir en Perú y tendrá su primera experiencia en Chile. Se trata de Gustavo Álvarez, de 49 años, quien sucederá a Mario Salas, quien terminó el año en el puesto 12, nuevamente lejos de los puestos que clasifican a Copa Sudamericana.
Desde 2017 a la fecha, el acero ha tenido 6 técnicos y 4 de ellos han sido argentinos. Antes estuvieron César Vigevani, Juan José Luvera y Nicolás Larcamón, el único que pasó más de una temporada en el club.
¿Y cómo le ha ido a Álvarez en sus anteriores experiencias? En Atlético Grau, de Perú, no querían que se fuera. Lamentaron su salida porque después de un titubeante Apertura (solo logró el 33,3 por ciento de los puntos) realizó un notable Clausura que lo tuvo puntero durante varios pasajes del torneo y, finalmente, remató en un tercer puesto que lo dejó muy cerca de meterse en una histórica Copa Sudamericana.
Como técnico arrancó en el propio Temperley, 8 años después de su retiro, con regulares resultados hasta que decidió dirigir una división más abajo, en Aldosivi, donde ascendió como campeón de la campaña 2017-2018 y en Primera aguantó año y medio y agarró banca en Patronato. Ahí ganó 2 partidos de 17 antes de hacer maletas hacia Perú.
Su esquema habitual en aquel país, con el que logró buenos resultados, fue utilizando línea de cuatro defensores, dos volantes de corte, tres mediocampistas sobre esa dupla -con un enganche clásico- y un “9” de área.
El nuevo estratega de la usina declaró que “estaba interiorizado de la liga y de Huachipato, acá hay más dinamismo y otra intensidad, pero veo recursos genuinos como la buena técnica y talento, que son comunes en Chile y Perú”.
Álvarez agregó que “he dirigido equipos que debían mantener la categoría, otros pensando en torneos internacionales y siempre el mensaje es ir por los tres puntos que vienen. Busco un equipo ambicioso para atacar, que no ceda la iniciativa al rival”.