Copiapó entró inspirado, de la mano de Maxi Quinteros, pero el Campanil cometió todas las fallas posibles en la zaga y cerró el 2022 goleado, con 5 tantos en contra. El fin de un sueño.
Sabían que era el rival más duro de esta liguilla, pero la ilusión existía y era gigante. Más aún, cuando Copiapó anunció que su estrella Jorge Luna, nuevamente se quedaba fuera. Pero el local entró derechamente a ahogar al Campanil, marcó después de la media hora y no sacó jamás el pie del acelerador. Defensivamente, los penquistas cometieron todos los errores posibles y Maximiliano Quinteros se dio un paseo en esta vuelta que terminó en un doloroso 1-5.
Miguel Ramírez apostó por un mediocampo plagado de contención (Medel, Orellana y Canales), pero nunca pudo controlar el juego, que se generaba principalmente desde los pies de Marco Medel. Por el lado derecho, Juan Contreras desbordaba constantemente a Hardy Cavero y los pases al vacío eran dagas que obligaban al portero Manuel García a salir casi como un líbero y salvar su puerta.
Daba la sensación de que el gol caería en cualquier momento y así fue. A los 34’ Soza metió un pase al vacío, Quinteros le ganó la posición con facilidad a Lauler y anotó rematando al primer poste. Pero lo peor es que el equipo de Almandoz golpeó doble porque, a los 37’, Quinteros ganó la espalda de todos, se llevó con un amague a Lauler y su remate que ya iba a gol fue empujado a la red por Soza.
Terminó el primer tiempo y la UdeC, sin cambios, volvió renovado, apuró a los nortinos y descontó temprano, a los 57’ tras un cóner de Felipe Orellana que peinó Simón Contreras y empalmó de buena forma Eric Godoy.
Se apretaba el marcador y la UdeC iba por un nuevo milagro, pero otro error en la zaga cerró cualquier tipo de lucha. A los 63’ Saldías despeja muy alto, nadie va al rebote y Bández pivotea para que Quinteros fusile con otro testazo.
El resto fue un vendaval de Copiapó llegando una y otra vez y aumentando con Quinteros eludiendo a García a los 71’ y Camilo Ponce marcando en un mano a mano tras grosero error de Eric Godoy cabceando hacia atrás. Triste final para un segundo semestre de ensueño.