¿Cómo se mantiene? ¿Por qué el terreno de juego se ha deteriorado en los últimos años? Así se trabaja para cuidar un recinto que este sábado recibirá otro partido bajo un clima lluvioso: Fernández Vial vs U. de Concepción.
Si de algo se han jactado muchos penquistas en los últimos años, es del Ester Roa. Su infraestructura y modernidad lo alzan como el mejor estadio de Chile desde que en 2015 fue remodelado.
Sin embargo, bastante mal se ha visto la cancha desde el invierno de 2021 hasta la actualidad. ¿Cómo se mantiene la cancha? ¿Qué tipo de trabajos se realizan durante el año para cuidar una superficie donde se reciben muchos partidos en el año?
Pretemporada
Al igual que un plantel, a inicio de año la cancha de Collao recibe un intenso trabajo que, de hecho, es el más importante. Es la base para que la superficie aguante lo mejor posible durante la temporada. A aquellas labores se les denomina “parada de cancha”. En tal periodo -donde no hay competencia- se realiza la resiembra, se evalúa la cantidad de semilla que se aplica, las perforaciones, la aplicación de arena, químicos de fortalecimiento, entre otros trabajos. “En verano la cancha parece colador”, cuentan a Diario Concepción, agregando que “el periodo de parada de cancha que se recomienda es de tres meses, pero en Chile eso no ocurre casi en ninguna cancha, ya que el torneo no da margen”.
Así se cuida
Junto a lo anterior, que es la base para tener una cancha en buenas condiciones para la temporada completa, el trato de la superficie es distinto dependiendo la estación del año. En invierno, por ejemplo, el pasto se corta una vez cada 10 días, mientras que en verano se realiza aquel proceso unas 3 o 4 veces por semana. El césped del Ester Roa es un pasto de invierno, por lo cual es muy difícil de mantener cuando las temperaturas son muy altas. Si no se riega con frecuencia, el césped se pone amarillo y con hongos.
Colapsó
¿Qué se hizo mal entonces para que la cancha hoy luzca tan mala? Al igual que en 2021, trabajos de perforación mal realizados tienen en delicado estado el campo. No se trata que se estén jugando muchos partidos. De hecho, 200 horas de uso al año son lo ideal de acuerdo a la norma, y en el Ester Roa a lo que más se ha llegado es a las 150, con un promedio de 100 en los últimos años desde la remodelación.
Lo que está fallando es la base. La cancha del Ester Roa Rebolledo está hecha desde abajo hacia arriba con un sistema de drenaje denominado espina de pescado, por su forma en “V” con tuberías que absorben el agua, la arrastran rápido hacia la orilla y la derivan a una red de agua-lluvia.
Más arriba. hay 30 centímetros de arena, gravilla y finalmente césped. ¿Y tierra? No tiene. Por lo mismo, es erróneo creer que la mancha café que hoy tiene el estadio es barro. ¿Qué es entonces? Thatch, una capa de pasto en descomposición que debería ser de 2 centímetros, pero que hoy es de 5 o 7 cms. Y se llegó a eso por una mala mantención, con un tractor que buscando perforar la cancha para favorecer su drenaje, la destrozó. Precisamente el uso de maquinaria pesada tiene hoy malo el campo de juego. Las ruedas de tal vehículo hicieron apretar el thatch en un momento donde debido al clima, la cancha estaba muy blanda. Tal como una esponja a la que se le echa encima algo negro y luego se le aprieta, la superficie del Ester Roa explotó. Es vital que el thatch se mantenga solamente con un largo de 2 centímetros, o los nutrientes y agua no llegarán al drenaje. Eso es lo que hoy no está ocurriendo.
Lo anterior es precisamente lo que indican los estudios de suelo aplicados al recinto, en un hecho que tiene preocupados a quienes están a cargo de la cancha. De aquí a final de año, o por lo menos hasta septiembre donde la superficie va a mejorar por el clima, los trabajos podrán ser sólo de mantención.
Las responsabilidades en este caso son compartidas, en un recinto que este fin de semana volverá a recibir fútbol con el encuentro que jugarán Fernández Vial vs Universidad de Concepción. Se pronostica lluvia … ¿cuánto aguantará la cancha este sábado?