Cuando parecía muerto, el equipo que ahora diestra Mario Salas alzó cabeza y suma tres victorias en fila. Mazzantti guió el 2-0 sobre Wanderers.
Es cierto que Wanderers viene jugando con hartas bajas y mucho juveniles, pero hoy lo más difícil para Huachipato es jugar contra la presión propia, contra la tabla que desde abajo amenaza con jalarlos de los pies. Por eso costó tanto, pero una expulsión desenredó el problema y, con superioridad en ataque, el cuadro de Mario Salas aprovechó la buena visión de Walter Mazzantti para asistir dos veces a sus compañeros y sellar el 2-0. Triunfazo para un equipo que sumó 9 de los últimos 9 y es otro Huachipato. Uno de guerreros. Uno de pelea.
El primer tiempo fue de absoluto dominio acerero, pero sin demasiadas llegadas claras a gol, salvo un derechazo rasante al poste de Mazzanti tras pase de Luciano Nequecaur y dos remates de distancia de Israel Poblete, uno de zurda pasó bastante cerca del arco de Reyes.
Pero faltaba y si el gol no llegaba luego empezaría la desesperación. La gente se impacientaba un poco cuando Víctor Espinoza derribó a Mazzantti -hasta en eso fue importante- y se fue expulsado a los 58’ por segunda tarjeta amarilla. El acero no tardó mucho en lanzarse sobre los caturros y abrió la cuenta en un centro de Montes que Mazzantti pivoteó perfecto al centro del área para encontrar la “palomita” goleadora de Nequecaur. Corrían 62 minutos y tercer gol de uno que se enchufó en el momento justo, aunque antes había perdido uno increíble bajo el arco.
Pero había que rematarlo y ojalá sacar una diferencia de gol que después pueda ser clave. Así llegaban y llegaban los siderúrgicos que pudieron aumentar con una “chilenita” de Cuevas – de muy buen partido- a las manos del portero y consiguió el segundo con notable desborde de Mazzantti por la derecha, corriendo casi la mitad del campo para llegar a las barbas de Reyes y tocar al lado. Ahí estaba solo Cris Martínez, recién ingresado, para cerrar la tarea a los 86’. Grito de desahogo para el máximo artillero de la usina con 6 anotaciones, pero que venía con problemas físicos y se moría por estar.
Mazzantti declaró que “es un triunfo enorme, venimos peleando un montón para que salgan las cosas y estoy contento por estas dos asistencias. Costó que saliera el gol y había que tener mente fría, hacer circular el balón y ya iba a salir. Con Católica iremos a ganar, aunque ellos estén peleando el campeonato. Admiro la paciencia del equipo partido a partido y lo que hemos hecho para revertir esto. Estamos dejando todo y también pelearemos estas dos finales”.
Huachipato llegó a 34 puntos y se acercó a todo el grupo entre 34 y 36 puntos. Todos a la mano. Ahora van a casa de Católica y que se agarren ellos. El acero está vivo.