El acero cayó nuevamente en casa: fue 0-1 ante Deportes Antofagasta, complicando su futuro en Primera División.
Podían seguir jugando dos horas más y el marcador seguramente no cambiaría. Huachipato vive la crisis más grave de los últimos años, tras caer ante Deportes Antofagasta en casa, acumular su octavo partido sin ganar y estancarse cada vez con más peligro en zona de promoción.
Si el acero ganaba ayer, tampoco saldría de aquel incómodo puesto, por lo cual complicó gravemente su futuro en el campeonato: una victoria de Curicó esta tarde ante Unión Española, implicaría quedar a seis unidades de sus rivales más cercanos: O’Higgins y Palestino, que ayer igualaron 2-2 en La Cisterna y quedaron con 29 puntos.
Desesperados
Huachipato saltó a la cancha y fue el equipo de prácticamente toda la temporada, adueñándose de la pelota, teniendo más llegadas que el rival y tomando el protagonismo del partido. La pelota se paseaba por el arco visitante, pero como en todo 2021, faltaba finiquito. Once remates tuvo un equipo en la etapa inicial, mientras que Antofagasta sólo disparó al arco en una ocasión, que terminó en gol.
Al 37’, Ariel Uribe, se tomó varios segundos para acomodar el balón, avanzar, levantar la cabeza y con un impecable zurdazo anotar el 1-0. Algo más pudo hacer el portero Martin Parra, quien ante el fuerte impacto del remate saltó e intentó reaccionar cuando la pelota ya iba entrando al arco. Un balde de agua fría para la usina.
El reloj avanzaba y la impaciencia era enorme. Huachipato, con justa razón, se desesperó, aunque siguió buscando el gol. 29 remates, cinco de ellos al arco, tuvo un equipo que transformó en gran figura a Ignacio González, que estrelló el balón en los postes y que no pudo encontrar espacios.
Luvera estalló en furia contra los pasapelotas, el equipo jugó desde el 60’ con la sensación de que sólo quedaban cinco minutos de duelo, en una mezcla de impotencia, rabia, y desesperación. Una derrota que genera cada vez más preocupación.