Por un lado, nuevo empate en casa, jugando desde los 9 minutos con un hombre más. Por otro, el fin de la primera rueda con Huachipato invicto, sumando 5 puntos y peleando la clasificación en Copa Sudamericana. Decida usted qué parte del vaso quiere mirar. El técnico Juan José Luvera destacó la valentía de sus jóvenes dirigidos en el 1-1 ante Rosario Central, en Viña del Mar, pero sí reconoció que faltó contundencia. Ocasiones de gol, otra vez hubo de sobra.
El argentino señaló que “no pudimos concretar las situaciones que tuvimos y ellos jugaron bien saliendo de contra, con su buena condición física. Somos un plantel joven, con jugadores que van a aprendiendo en esta Copa. Hemos sumado, aunque por ahí perdimos dos puntos. Faltó contundencia. Rosario presionó más alto en un momento y empezamos a confundirnos en los primeros minutos del segundo tiempo. Después del empate reaccionamos y volvimos a entrar en el partido. Ahí el portero rival fue la figura”.
Lo tuvo Rodríguez bajo el arco, Mazzanti entrando por derecha, Garrido frontal y tomando un rebote, Baeza y Silva en el segundo tiempo, Martínez cabeceando sobre la mala salida del portero y otro testazo en tiempo agregado. Todas para un Huachipato que mereció más, pero solo marcó uno.
Luvera destacó que “la idea era ganar en casa, pero vi jóvenes con mucha valentía para desarrollar nuestro juego. Los argentinos y brasileños tienen ligas con otro ritmo y quizás debemos darle más circulación a la pelota. Creo que sí generamos superioridad, pero faltó contundencia. Nos queda ir a Paraguay con un rival duro, chocar otra vez con los argentinos, pero con lo nuestro hay que estar tranquilos. Estamos siendo competitivos, más allá de unos resultados mejores que otros. Valoro mucho a estos chicos, algunos viviendo su primera experiencia internacional”.
Buena figura fue otra vez Walter Mazzantti, desbordando por ambos costados, asistiendo y rematando al arco. El argentino analizó que “tuvimos situaciones de gol, no las aprovechamos. El rival nos atacó de contra y eso también nos lastimó un poco, debemos corregir eso en la semana. Ellos supieron jugar al pelotazo con uno menos. Hicimos el juego de Huachipato, hicimos daño y nos falta ser más eficaces para convertir más y quedar más tranquilos. Debemos terminar mejor las jugadas, pero el equipo está bien. No perdimos y seguimos arriba. Estamos imponiendo nuestro ritmo en cada partido y ahora hay que pensar en el domingo para después meternos de nuevo en la Copa”.
Del otro lado había conformidad, orgullo. Y también rabia porque no les gustó la temprana expulsión de Luca Martínez, por doble tarjeta amarilla a los 9 minutos. La segunda, por falta sobre Castellón.
El goleador rosarino, Diego Zabala, analizó que “rara vez se expulsa un jugador tan temprano, a menos que sea muy alevosa la falta. Creo que el arquero grita más de lo que le pegan y le sacó la segunda tarjeta. Lo bueno es que el equipo se sobrepuso y sacó un buen resultado. Dependemos de nosotros, tenemos dos partidos más en casa y debemos mirar ese lado positivo”.
Por su parte, el técnico Cristián González, expresó que “sumar fuera de casa siempre es importantísimo, aunque veníamos por más. Jugamos casi 85 minutos con uno menos y lo hicimos de igual a igual. Incluso, pudimos ganarlo. No sé cómo hubiera sido con once. Nos arropamos, juntamos las líneas y apostamos bien a la contra. Después intenté por las bandas, con los cambios, y me siento orgulloso de cómo nos sobrepusimos”.
El miércoles, Huachipato visitará a 12 de octubre y Rosario chocará con San Lorenzo en un grupo cerrado, donde cada detalle vale.