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El negativo balance de una temporada muy movida

Dos descensos, un subcampeonato y una clasificación internacional fue la cosecha de los equipos locales. El mercado de pases en Biobío tiene novedades.

Por: Carlos Campos 20 de Febrero 2021
Fotografía: Isidoro Valenzuela

Fue un 2020 inédito, donde todo costó el doble. El fútbol profesional en el Biobío tuvo una temporada amarga en sus dos divisiones, con equipos que perdieron la categoría como Deportes Concepción y U. de Concepción, y otros que sufrieron durante todo el torneo, como los aurinegros y acereros.

Satisfechos

En estricto rigor, Huachipato fue el único equipo que cumplió con el objetivo propuesto. Los acereros lograron clasificar a la Copa Sudamericana en un año donde nunca pudieron ser regulares y los números así lo reflejan. Fueron el mejor local, pero la peor visita del campeonato, con un Juan Sánchez Sotelo inspiradísimo que terminó su contrato con el club y dijo adiós ayer mediante redes sociales. “A mis compañeros, los que trabajan en el club, acereros y acereras, gracias. En Huachipato fui muy feliz, todos los éxitos y un abrazo de gol para el campeón del sur”, dijo el “Lobo” en su cuenta de Instagram. El futuro del atacante argentino de 33 años estará en Palestino.

A un paso

La campaña de Fernández Vial estuvo a un paso de ser histórica. Los aurinegros fueron segundos en el torneo, en una impresionante campaña de Claudio Rojas, quien logró sobre el 70% de rendimiento en su período, a diferencia del 50% que cosechó Garcés.

No alcanzó, sólo por la cuenta de ahorro que Lautaro de Buin logró sumar en el inicio del torneo. Hubo hasta 10 puntos de diferencia entre ambos elencos, que se igualaron a falta de sólo tres fechas para el final del campeonato. Hubo tropiezos de ambos, pero el 1-1 aurinegro ante Colina en la penúltima jornada fue la sentencia para un equipo que, de todas formas, seguirá luchando por subir a Primera B y ya renovó a su DT y al capitán Arturo Sanhueza, aunque perdió a Andrés Segovia, quien fichó por Melipilla.

Cabizbajos

Deportes Concepción arrancó la temporada con la ilusión propia de un equipo recién ascendido. En una temporada que sería de transición y aprendizaje tras el feliz retorno al profesionalismo, los lilas sufrieron un inesperado descenso que fue la consecuencia a largos errores ya sea dentro y fuera de la cancha.

Concepción estuvo 10 fechas sin ganar, cambió de técnico y tuvo una leve mejoría en resultados. Ganó tres veces seguidas y la salvación se veía cerca, pero de los últimos 15 puntos en disputa, el “León” sólo rescató uno. Terminó bajando en su propia casa ante un Vallenar que no ganaba hace 12 encuentros y hoy, su única esperanza, es que se ratifique algún castigo al propio club nortino por irregularidades económicas. Si los desafiliaron y castigaron tantas veces por temas similares, ¿por qué no se podrían ver favorecidos esta vez? Concepción debería volver al fútbol amateur, pero todo puede pasar en Segunda.

Situación similar para UdeC, que comenzó el torneo remando contra la corriente tras la mala campaña del club en 2019. A diferencia de lo que hizo Iquique, el Campanil pudo salvarse del descenso directo y así llegó a la “final” ante Colo Colo, en la que jugó un bajo partido y dijo adiós a la máxima categoría.

¿Y Lota Schwager? Los mineros no forman parte del fútbol profesional, pero lucharon por volver a Segunda y no pudieron. En una atípica temporada de Tercera División A, en un torneo con formato inédito, el cuadro del carbón levantó tras un mal inicio, estuvo a un paso de meterse en semifinales, pero su “bestia negra” le quitó el sueño. Provincial Ranco, por penales, eliminó a Lota Schwager. ¿Habrá clásico el próximo torneo en el amateur ante Deportes Concepción? La última palabra la tiene la Anfp.

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