Las dudas surgieron en la Cámara de Diputados. El lunes hubo comisión de Mujeres y Equidad de Género y se tocó el tema del fútbol femenino, sus carencias y sus dramas para reanudar en octubre, como estaba pensado tentativamente. Ahí estaban Pablo Milad, presidente de la Anfp, la ministra del Deporte, Cecilia Pérez, y también Iona Rothfeld, representando a la Anjuff. Su análisis no fue nada alentador.
Dentro de los puntos que acusaron, se habló de que solo el 30 por ciento de los clubes se está haciendo cargo de los traslados de las jugadoras para entrenar, que muchos equipos empezaron recién a practicar presencialmente o no han comenzado y que se hizo todo lo posible por retomar luego el fútbol masculino, pero no fue igual con las mujeres. De parte de las jugadoras se mencionó la posibilidad de una “postergación”.
Según Anjuff, solo 5 clubes han realizado charlas médicas e informado los protocolos a sus jugadoras y hay 5 clubes que aseguraron que no responderán por el transporte de sus futbolistas de la casa al entrenamiento.
La UdeC es uno de los clubes que aún no retoma las prácticas en cancha, aunque la vuelta está programada para esta semana. “Las jugadoras ya se realizaron los test PCR y están esperando los resultados comenzaríamos mañana o el viernes. Entrenaremos en el complejo deportivo del club”, comentó Nilson Concha, técnico del fútbol femenino del Campanil.
El DT explicó que “el tema de los traslados es importante porque la mayoría usa transporte público. Acá tenemos jugadoras de Cabrero, Chillán, Los Ángeles y el club se preocupa de tenerles una pensión, entregarles ayuda económica. Se hizo un catastro de quiénes podían volver y quiénes tenían problemas, se conversó y acordó todo de buena forma y nunca dejamos de entrenar por alguna otra plataforma”.
Sobre la posibilidad de postergar el retorno, apuntó que “hay que ser bien realistas. El fútbol masculino ya estaba con problemas económicos y si no volvían podía ser peor, tienen a Linares con un montón de jugadores contagiados. Imagínate para el femenino, donde siempre hay menos apoyo. Es claro que los clubes tienen obligaciones y preocupaciones que cumplir, pero creo que la Anfp y las autoridades tienen que ser capaces de buscar soluciones y eso significa necesariamente invertir e intervenir fuertemente”.
Porque la realidad es que en muchos casos el fútbol femenino está en vías de sostenerse por sí solo. “Nosotros comenzaremos a entrenar recién ahora porque nunca hubo una fecha clara y había que cuidar a las jugadoras. Mira, la Anfp tuvo que obligar a los clubes a que tuvieran rama femenina para que lo hicieran, salvo contados casos. Para algunos es un gasto extra y ni siquiera están muy bien para sostener su rama masculina. A mí me encantaría que les hicieran contrato a las 25 jugadoras, pero sé que aún no se puede. La Anfp tendrá que imponer algunas cosas”.