Ha jugado todos los minutos oficiales de la UdeC desde noviembre de 2016, incluyendo Copa Chile. El lateral lleva dos años a gran nivel y sueña con la selección chilena.
El torneo chileno lleva 22 fechas y solo 7 jugadores han disputado todos los minutos. Seis son arqueros, el otro es Ronald de la Fuente. Pero la marca del lateral izquierdo de la UdeC va mucho más allá. El oriundo del cerro San Francisco, de Talcahuano, no se pierde un minuto por Copa Chile y campeonato nacional desde noviembre de 2016. Una marca que se explica por muchos motivos y lo alza como el futbolista más regular del país.
“Todo partió con la llegada del ‘profe’ Bozán al club. Antes no tenía regularidad, pero él me citó primero contra San Luis y luego contra Wanderers, donde entré de titular y no salí más. Los únicos minutos que no jugué fueron por la Libertadores, cuando me expulsaron en los últimos minutos contra Vasco da Gama”, contó el ex Iberia y Huachipato.
De la Fuente explica que “lo más importante para tener regularidad es cuidarse, tener una buena condición física y descansar bien. Bueno, tampoco lesionarse. De la mano con eso viene la parte futbolística, porque no sirve de nada estar bien físicamente si no rindes en la cancha. Y, también, tienes que ser del gusto del técnico, que sienta que estás cumpliendo y no elija a otro”.
Y las tarjetas son otro tema. El formado en el acero recuerda las únicas expulsiones de su carrera. “Estando en Iberia, me expulsaron contra Linares. La segunda amarilla fue una mano que terminó en penal, pero al revisar el video me absolvieron, porque había pegado en mi hombro. La otra expulsión fue contra Vasco por una patada brutal… Es que fui a trancar con todo y no pensé que el rival se iba a frenar. Fue merecida”, señaló.
¿Se controla mucho con las patadas? De la Fuente advirtió que “no es tan así, pero trato de ser inteligente. Por ejemplo, creo que recibir una tarjeta por protestar es una tontera. Lo que no quita que de repente me gane una porque te supera la adrenalina. Igual trato de evitarlo. Como defensa, uno está súper expuesto y tampoco ando pensando en batir récords, me interesa más ganar el partido. Si va un defensa solo y hay que bajarlo, tendré que tomarlo y no lo voy a pensar. Primero está el equipo”.
Tiene 27 años y alcanzó su madurez. Es raro verle un partido malo, siempre es de los que cumplen y el hincha lo tiene entre sus favoritos. Por la banda izquierda, la selección no tiene muchas cartas, pero todavía no miran al sur. ¿Y por qué no De la Fuente?
El lateral confesó que “cada vez que escucho que el profesor Rueda va a dar una nueva nómina o llamar gente para un microciclo me ilusiono mucho. Miro la lista y digo ‘bueno, será para la otra’ y sigo trabajando. Creo que estos últimos dos años han sido los mejores de mi carrera y más ahora que la UdeC está peleando puestos de campeonato. Creo que se nota más. No soy quién para decir que deberían llamarme. Beausejour, por ejemplo, es un tremendo jugador en mi puesto. Solo sueño con un día vestirme de rojo… Me la jugaría a mil y confío en Dios en que llegará ese día”.