Los CER de remo y ciclismo perdieron a emblemáticos técnicos por decisión del gobierno central. Mismo caso vivido por el DT de canotaje, Gualberto Mesa, quien finalmente fue reincorporado.
El inexplicable despido del técnico Gualberto Mesa del Centro de Entrenamiento Regional (CER) de canotaje, que tanta polvareda levantó a inicios de este año, y que finalmente se resolvió a favor del cubano cuando la dirección central del IND echó pie atrás renovando su contrato, dio cuenta del centralismo desmedido que aún se vive en el deporte chileno.
Una decisión tomada desde Santiago que echaba por tierra un proceso reconocido por toda la administración deportiva regional y que, para desgracia de la actividad local, no fue un caso aislado.
Esto, luego de confirmarse que en la misma lista de despidos, aparecían los nombres de técnicos pertenecientes a otros importantes polos de desarrollo en Bío Bío, y que fueron “dados de baja” con el mismo pobre argumento utilizado en la situación de Mesa: “termino de contrato”.
Se trata de Hernán Cerro, entrenador ayudante del CER Avanzado de Remo, y de Mauro Henríquez, titular del CER Avanzado de Ciclismo, dos emblemáticos profesionales que se pierden en la Región, pese a encabezar exitosos procesos.
Sin argumentos
Tranquilo, pese al golpe, se muestra “Nano” Cerro, uno de los especialistas más destacados del remo regional y que habitualmente es convocado por el head coach nacional, Bienvenido Front, en los concentrados de la selección.
El entrenador, que por estos días está con el combinado criollo en Valdivia, reconoce que no se esperaba la noticia. “Me dejó bastante sorprendido, pero son políticas del deporte nacional que lamentablemente involucran a todos las especialidades, sin considerar los resultados”, parte diciendo.
Cerro dice que desconoce las causas de la decisión, más aun considerando el buen trabajo que estaba realizando junto a Juan Labra, técnico jefe del CER. “Siendo sincero, no se me entregó ninguna explicación. Entiendo que tanto la asociación como la federación apelaron. Pero queda la sensación que no fue correcto lo que se hizo, y preocupa porque si estamos recortando entrenadores, es imposible mejorar los resultados”, sentencia.
Similar opinión es la que manifiesta Mauro Henríquez, para quien estas son resoluciones que carecen de fundamento técnico. “Son situaciones que a lo mejor se hacen desde un escritorio y obedecen a otras estructuras deportivas, porque la verdad no tiene mucha explicación”.
“En Santiago desconocen todo el trabajo que uno realiza desde hace tanto tiempo, poniendo recursos humanos y materiales en pos de que el deporte crezca. Y arriesgando en muchos casos la integridad física, porque es sabido que el ciclismo acá en la zona tiene que practicarse en plena carretera, con todo el riesgo que ello implica”, concluye.