Algunos no dimensionan lo que cuesta estar entre esos 42 deportistas chilenos olímpicos. Supieran cómo se han sacado la cresta.
Algunos no dimensionan lo que cuesta estar entre esos 42 deportistas chilenos olímpicos. Supieran cómo se han sacado la cresta.
Paulo Inostroza P.
paulo.inostroza@diarioconcepcion.cl
Estábamos sentados en una tribuna de madera en Valdivia. Todos sobre la pista eran estudiantes de enseñanza media parándose de igual a igual con los argentinos. Una muchacha brillaba allá atrás en los lanzamientos, apenas la veíamos. Las chicas jugaban a pintarse las uñas antes de salir a correr. Todas eran buenas. No cabía duda. Pero una te dejaba helado al verla acelerar.
"Ahí viene la Isi" y todos dejábamos de tomar café y concentrábamos la vista en lo que iba a pasar. Los trasandinos sabían que verían algo fuera de lo común. Un biotipo impropio de nuestro país, un tranco comparable con la fauna más salvaje, esa caballera rubia que no pasa inadvertida. Como si no fuera real. Esa tarde lo ganó todo y la siguiente también.
A Isidora se le suelta su característica trenza y, casi con desdén, se la arregla mientras corre. Nos reímos. Su imponente velocidad llega a ser burlesca, sin querer. Fue hace 4 años y Valdivia estaba caluroso. Jorge Grosser tomaba el tiempo y no sonreía. Acá hay que seguir trabajando, trasladarse a Santiago. Tocamos un techo. La Región del Bío Bío campeona y muchas de esas figuras hoy se dedican a otra cosa. Guardan fotos, con orgullo.
Oro en Sao Paulo, plata en Lima y varios récords. Al campeonato siguiente batiendo otra marca chilena, que ya era de ella. ¿Puede ser abanderada de Chile? El crítico de Facebook dice que la proponen solo, porque es bonita. Que ahora es rostro como de tres marcas y hay otras con más méritos. Que a nivel mundial es una más y posibilidades de medallas son pocazas.
Y seguro que a Isidora le da lo mismo. Porque todos los corredores que brillan en metros planos han tenido que saltar un montón de vallas. Víctor Aravena, ni hablar. Y las niñas del remo y todos los penquistas que irán a Río de Janeiro. Algunos no dimensionan lo que cuesta estar entre esos 42 deportistas chilenos olímpicos. Lo que significa estar donde correrá Bolt y en un gimnasio de al lado meterá triples Kevin Durant. Supieran cómo se han sacado la cresta.
Ahí estará la "Isi" que arrasaba en Valdivia y en los escolares, pero no se quedó con eso. Con ganar donde ya se le hacía fácil. Quiso apostar donde parece imposible, contra las africanas y las estrellas centroamericanas. Con las gringas. Porque hay talento y biotipo, pero sobre todo trabajo y ambición bien entendida. Harto trabajo y dejar cosas de lado. Cosas de jóvenes. Y qué lindo que una marca de autos y otra de productos femeninos se fije en una atleta. Que sienta que nos representa. Porque cualquiera que se levante temprano a trabajar por sus sueños puede verse en su zancada. Aunque seamos morenitos.