Un positivo y optimista balance deja “Horizonte de lo Humano. Sociedad-Sujeto-Persona”, cita que estuvo marcada por una programación casi en su mayoría presencial, apuesta que la comunidad penquista respondió con creces.
Hasta en su última actividad, realizada en la jornada de ayer a cargo de la Sinfónica, la Escuela de Verano UdeC “Horizonte de lo Humano. Sociedad-Sujeto-Persona” sostuvo su objetivo de propiciar el encuentro con la comunidad, lo cual el año pese a no perder la continuidad, el formato virtual puso como barreras las pantallas como única opción frente al complicado panorama pandémico.
Pese a que aquello ha sido fluctuante, con cifras estos últimos días alarmantes, la vacunación ha avanzado a paso firme y las personas en general tienen internalizadas las normas sanitarias, desde Extensión UdeC en base a aquello apostaron por una cita estival académica cultural con una programación en su mayoría presencial, lo cual resultó de manera exitosa.
“Estamos realmente contentos, ya que hemos tenido una muy buena respuesta del público, por ejemplo, en la Feria Internacional del Libro (Filbiobío) las personas no sólo la recorrieron sino que también compró mucho libro y participó activamente de toda su programación. Lo mismo ocurrió con las actividades que trasladamos del Foro al Teatro UdeC, en su mayoría con cupos agotados. Entonces nos dimos cuenta que existía una necesidad, por parte de la gente, de asistir presencialmente a eventos artísticos y culturales, lo cual también hemos notado en la asistencia a la Pinacoteca que ha tenido un flujo de gente como antes de la pandemia”, dijo Rodrigo Piracés, director de Extensión y Pinacoteca UdeC.
Palabras a las que añadió que “demuestra que las actividades programadas por la Escuela de Verano siguen manteniendo su estándar, el cual lo da la necesidad de la comunidad. Si esta responde, es que hay algo que está en sintonía. En ese sentido, la universidad apostó bien en insistir en hacer las actividades presenciales con eventos con aforo acotado y todas las normas sanitarias respectivas”.
Si bien al momento de elegir como lo más destacado dentro de la extensa programación que ofreció “Horizonte de lo Humano” -tanto en lo presencial como en lo virtual-, Piracés fuera de la mencionada Filbiobío, las distintas muestras en la Casa del Arte y Sala David Stitchkin señaló la inclusión del Festival de Poesía y Música (PM#5), el cual llegó por primera vez a Concepción, “se incribe como un hito bien importante, porque hay muchas personas que llegaron al Teatro UdeC, al Auditorio de Humanidades, y a los otros espacios que contemplaba el evento, con la idea de encontrarse con una poesía llena de rimas y a alguien con guitarra, pero ocurrió todo lo contrario. Se encontraron con una propuesta innovadora y muy novedosa. Fue algo raro y extraño, pero que siento que vino a aportar una mirada nueva a lo que se entiende de manera tradicional por poesía”, dijo.
Y otro de los puntos altos, fue la participación de la Sinfónica UdeC, la cual tanto para la apertura como para el cierre, desplegó repertorios de obras de compositores clásicos con puestas escénicas llamativas y atrayentes para toda la familia, “una mirada al origen del origen de las cosas, lo que nos puso en una perspectiva universal, la cual de alguna manera se tensionó con la idea de lo humano que planteamos como hilo conductor general de la Escuela de Verano. Lo propuesto por la Sinfónica fue más allá del horizonte”, señaló el director de Extensión UdeC.