El artista expone, hasta el 5 de noviembre en la sala de Artistas del Acero, parte de su propuesta plástica visual, la cual contempla variedad de trabajos en pintura, móviles, magnetos y lumínicas.
Es una muestra que estaba pensada para ser desplegada en formato virtual durante este segundo semestre, sin embargo y gracias a las cifras positivas de la pandemia, lo que permitió que la mayoría de los espacios culturales volvieran a sus actividades presenciales, era posible que fuera montada en sala.
“Me dio mucha alegría cuando me dijeron del cambio, es lo ideal de una exposición. Es distinto el pensar el montaje sabiendo que gente, de carne y hueso, lo verán de forma real, in situ”, señaló Eugenio Brito sobre su muestra “Sin cuenta y sin vuelta”, que por estos días y hasta el 5 de noviembre estará montada en la sala de exposiciones de Artistas del Acero.
Una instancia especial para el reconocido artista, ya que más allá de esta vuelta a la presencialidad, viene a celebrar sus 50 años de vida, de los cuales más de la mitad ha dedicado al arte. “Va en línea con el nombre de la exposición, que viene por mi reciente cumpleaños, una cifra importante de la cual 27 he dedicado al arte, son muchos más , pero es una referencia desde mi primera muestra individual. Contiene gran parte de las diferentes técnicas artísticas que he cultivado, ya sea pinturas, arte cinético (móviles, magnetos y lumínicas) y acidulaciones sobre metal. La diversidad es una de mis características como artista, no me gusta encasillarme en una cosa”, dijo Brito.
Esto último, es una especie de sello y marca propia de la línea de trabajo del artista, un proceso que requiere tiempo y también prolijidad, con la cual viene experimentando desde hace años. “La acidulación sobre metal -cobre y bronce- se entiende como el proceso por el cual el metal se corroe controladamente en el tiempo. Técnica-soporte que he desarrollado de manera experimental, intuitiva e investigativa desde el año 1996 motivado por la relación arte-ciencia y las posibilidades que esta ofrece a la labor artística, tanto en lo conceptual como en la técnica. En términos sencillos, se puede decir que es una ‘oxidación controlada’ mediante compuestos químicos, en donde el tiempo junto a las condiciones ambientales (naturales y artificiales) van develando la imagen y coloreidad, símil como el fenómeno fotográfico. Una vez asentada y estabilizada la reacción, se sella con resina transparente”, explicó el artista plástico.
Otro de los pasajes que llama la atención de la exposición es lo referente al arte cinético, el cual Brito explicó que “todo móvil es una estructura en equilibrio -armónico- conformando un sistema donde sus fuerzas internas se anulan, o sea, la sumatoria es igual a cero. Estructura que se organiza en una secuencia progresiva de partes que se enlazan entre sí, con la condición que una parte sostenga y equilibre a las anteriores, comenzando en un principio, pero sin un fin: puede crecer hasta el infinito”.
Dentro de la diversidad de su propuesta, el artista igual encuentra que existe una conexión que atraviesa todo y que con los años se ha vuelto más evidente. “Por muy distintas que sean las técnicas, igual tienen que ver en sí, es decir, tienen un hilo conductor. Algo que me he dado cuenta con el tiempo y la madurez, mi tema central -en gran parte de lo que hago- es el cruce del arte con la ciencia”, concluyó.