El montaje corresponde una revisión de un trabajo realizado el año 1994 por la destacada bailarina Paola Aste. Reestreno que apunta a la importancia del cuidado de la naturaleza.
La depredación del bosque nativo y su fauna, son el sustento temático de la nueva propuesta de la Compañía de Danza Calaucalis, la cual lleva por título “Lihuen, danza para la infancia”, y que fue estrenada la jornada del domingo y que durante octubre tiene pactada una serie de funciones al aire libre.
Financiado por el Fondart Regional de Creación Artística 2019 y originalmente creada en el año 1994 por su directora Paola Aste, esta reversión apunta especialmente al público infantil, aunque igual está pensada como una obra familiar. Es así que a través de la danza, se busca crear conciencia y hacer énfasis en el cuidado de la naturaleza, temática que desde hace décadas está presente y muy vigente.
“Queremos, a través de esta historia, reflexionar un poco sobre estas temáticas y que los niños se sientan identificados y cuidar el medioambiente, los árboles, los animales, el respeto y el amor”, manifestó Aste.
A lo que la experimentada bailarina y coreógrafa local añadió que “el cuerpo es una herramienta de expresión. Con el cuerpo nosotros vivimos, expresamos todos nuestros sentimientos, nuestras emociones, el diario vivir, nuestro cansancio, la alegría, la frustración y la pena. Entonces, evidentemente que todo esto llevado a una narrativa corporal los niños podrán reconocer lo que estamos tratando de transmitirles”.
La situación sanitaria obligó la postergación de la creación del proyecto hasta el verano del año pasado, el cual luego se vio nuevamente interrumpido por las diversas cuarentenas impuestas. Un proceso más extenso y complejo de lo habitual para este tipo de montajes.
“Las experiencias creativas son reales rituales, son como un retiro del mundo. En este caso ha sido un retiro bastante accidentado por las cuarentenas. Este proyecto debía partir originalmente en 2020, justo cuando comenzó la pandemia”, afirmó Andrea Briano, bailarina de Calaucalis y productora del proyecto.
En este mismo sentido, y en el contexto de las restricciones sanitarias aún presentes, “Lihuen, danza para la infancia”, proyecta la realización de tres funciones al aire libre: Plaza Condell (10 de octubre), Laguna Redonda (17 de octubre) y Laguna Lo Méndez (31 de octubre). Presentaciones pactadas al mediodía y 16.00 horas. “La idea es llevar la obra a espacios públicos, parques, anfiteatros. Los niños y las niñas necesitan la presencia del arte vivo”, acotó Briano.
En detalle, el elenco del montaje está compuesto por Mararena Nahuelcura, Eduardo Aguilera, Andrea Briano y Daniela Pérez, todos ellos ex integrantes del desaparecido Centro de Danza Calaucán, y actualmente son parte de la Compañía de Danza Calaucalis. Además de ellos son parte del staff las bailarinas de la Compañía Con Tensión, María José Yáñez y Carola Mardones, y también del Colectivo Incorpóreas participan Olivia Cornejo y Lissete Navarrete. Completan el equipo el músico Cuti Aste (compositor de las piezas sonoras del montaje), y Jorge Briano y Martín Garrido en interpretación y arreglos.