Por Hugo Ramos Lagos

A raíz de la publicación del informe actualizado del Análisis Nacional de Amenaza y Riesgo por Incendios Forestales, elaborado por la Conaf, surgieron más detalles sobre el actual escenario regional.

Hay que recordar que, entre los resultados del análisis, se destaca a la Región del Biobío como aquella que posee la mayor superficie bajo amenaza en la categoría “Muy Alta”, equivalente a un 6,5 % de su territorio (156 mil 270 hectáreas).

La seremi de Agricultura, Pamela Gatti, sostuvo que, como Ministerio, se han comprometido a conocer realmente el comportamiento del fuego. Por lo cual el mapeo es “una demostración de los esfuerzos que se hicieron desde Conaf para conocer el territorio y saber el comportamiento del fuego, donde existe mayor riesgo”.

Según Gatti, el sondeo “no solo beneficia a Senapred, también al Sinapred (Sistema Nacional de Prevención y Respuesta Ante Desastre), pues la toma de decisiones requiere, entre otras cosas, el disponer de información actualizada, contextualizada y situada que permita tomar una buena estrategia para incendios forestales”.

En adición, consultada por Diario Concepción, la seremi explicó que a nivel regional, “el Gran Concepción, Arauco, Lebu y Curanilahue” son las zonas con la mayor concentración de superficie bajo amenaza “Muy Alta”.

Según consignó, en el Biobío, dadas las condiciones climáticas y topográficas, sumado al comportamiento del fuego, los incendios forestales son “cada vez más agresivos”.

“Por eso es importante este tipo de herramientas, que le permitan fortalecer un trabajo mancomunado a los entes estatales que están detrás de la prevención”, añadió.

Contactados los municipios Lebu, Curanilahue y Arauco, hasta el cierre de esta nota no se pronunciaron al respecto.

Zonas de interfaz

Ahora bien, sobre la delimitación de las Zonas de Interfaz para la prevención y el combate de incendios forestales, la Conaf lanzó recientemente un informe en donde se explican y delimitan todos los casos posibles.

Según dicho informe, “la planificación urbana no ha sido capaz de frenar el crecimiento expansivo periférico, generando mayor ocupación de terrenos agrícolas y naturales”, situación que, explican, ha generado la proliferación de áreas de interfaz o Wildland Urban Interface (WIU).

Dentro de estas últimas, el estudio identificó siete, y le otorgó a todas un área de influencia específica en metros. La primera corresponde a los Consolidados Urbanos Principales (500 m), seguidos por los Secundarios (300 m), las Aldeas (150 m) y las Viviendas Rurales (50 m). Por contraparte, a las parcelaciones y loteos irregulares no se les aplicó un área de influencia.

En detalle, Conaf consignó que los Loteos Irregulares hacen referencia a ocupaciones de terreno que no cuentan con permiso o recepción definitiva correspondiente. También otros asentamientos poblados que se acogieron a leyes excepcionales para su regularización o para la adquisición del dominio sobre sitios, pero que no cuentan con la correspondiente recepción definitiva de las obras.  Sin embargo, se aplica también la etiqueta a todos los asentamientos que cuentan formalmente con un certificado de recepción definitiva en espera de ser modificado.

Respecto al informe, el director regional de entidad, Esteban Krause, manifestó que se trata de “un instrumento que nos permite detectar —con mayor precisión— las amenazas y vulnerabilidades en un territorio determinado, para focalizar las medidas de prevención con las comunidades y autoridades locales de estos sectores de riesgo”.

Además, Krause recalcó que “la delimitación de las Zonas de Interfaz también nos permite fortalecer el proyecto de la Ley de Incendios, la cual actualmente está en el Congreso, y que busca una mejor planificación territorial y regulación de la actividad forestal, con medidas preventivas obligatorias y sanciones”.

“En definitiva, nos posibilita mirar con mayor detenimiento el territorio para generar más conciencia”, concluyó.