Blanquita Honorato detalló cómo funcionará en la Región el Servicio Nacional de Protección Especializada que sustituirá al Sename a partir de octubre.
El 5 de enero de 2021 fue publicada en el Diario Oficial la Ley N°21.302, más conocida como Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, el que tendrá por objeto garantizar la protección de niños, niñas y adolescentes vulnerados en sus derechos fundamentales.
Para conversar sobre las implicancias y la implementación en la Región del Biobío, una vez que se ponga en marcha a partir de octubre de este año, Diario Concepción conversó con la subsecretaria de la Niñez, Blanquita Honorato.
-¿Cómo va a operar este nuevo sistema, para evitar repetir vulneraciones como las del Hogar Nido, en Hualpén?
-Se establecerá una política de tolerancia 0 contra las vulneraciones de derecho y eso implica desde la acreditación de un organismo público o privado que va ejecutar un programa, quienes van a estar sujetos fiscalizaciones permanentes, que de no cumplirlas podrán incluso perder la acreditación.
-Para ello, ¿se establecerán capacitaciones a los funcionarios?
-Primero, se revisará que los funcionarios no estén en el registro nacional de pedófilos, una vez sorteado eso, tendrán asistencia técnica para prevenir posibles vulneraciones al interior de las residencias. Además, hemos cambiado los protocolos de actuar, tanto del Ministerio de Salud y de Carabineros, para lograr que los niños reciban una atención integral.
-En caso de haber vulneraciones, ¿quién se hará responsable?
-Será el director regional del Servicio quien deberá responsabilizarse por garantizar -así lo establece la ley- la oferta suficiente de cobertura y calidad de todas las líneas de acción del nuevo sistema. Podrá gestionar mejor su oferta, terminando con la lógica centralista para hacer valer el cumplimiento de los estándares, por parte de los organismos colaboradores.
-¿Cómo se va a trabajar para lograr la reinserción familiar?
– A diferencia del Sename que fue muy castigador, queremos restablecer el vínculo y en el caso que esto no se pueda se optará por una familia de acogida, por medio de parientes u otros que tengan interés de acogerlos.
En el caso que se opte por una residencia, esta tendrá que ser de carácter familiar, las que son pequeñas, de no más de 15 niños, insertas dentro de la comunidad para que tengan una vida lo más regular posible
-¿Cómo se abordará el rechazo a las residencias en los barrios?
Esto ha sido bastante difícil, al Sename le ha costado insertar una residencia en un barrio residencial. Algo que ayudará es la separación del antiguo servicio, por lo tanto, esperamos que se entienda que son niños vulnerados y no mal llamados “delincuentes”.
“Estamos avanzando en un cambio cultural, hoy estamos conversando con los vecinos para hacer el tejido social y poder evitar las malas etiquetas, la idea es poner a los niños en el centro, queremos que los programas se ajusten a sus necesidades, fortaleciendo los territorios”, enfatizó la subsecretaria Honorato.