Autoridades regionales recibieron al primer avión que traía las dosis del inmunizador. Tras la recepción, Carabineros escoltó todo el procedimiento de distribución por los diversos centros de salud del Biobío.
Cuando el reloj marcaba las 10:30 de la mañana, se vivió un momento que puede cambiar el curso de la pandemia en la Región. A esa hora, desde Santiago, llegó el primer cargamento con las primeras 2.050 dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech, proceso que estuvo a cargo de la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, quien fue recibida por el intendente Patricio Kuhn y el seremi de Salud, Héctor Muñoz.
Tras el aterrizaje, las dosis fueron distribuidas hacia los 13 centros de salud determinados, proceso que fue escoltado con una gran logística por parte de Carabineros.
El primer destino fue el Hospital Higueras de Talcahuano, donde la médico internista de la UCI, Dra. Sara Delgado, quien indicó que “como equipo de salud, si bien hacemos nuestro trabajo con agrado, estos 10 meses de pandemia han sido difíciles y agotadores desde el punto de vista emocional, por lo que hago un llamado a confiar en la vacuna, porque es una luz de esperanza”.
Tras ella, fue inmunizada la enfermera supervisora de la UCI del recinto asistencial, Carolina Campos, quien indicó que “vamos a seguir trabajando con más ánimo a la población, no hay que bajar la guardia y seguir cuidándonos”.
Paralelamente, en Los Ángeles, comuna que concentra la mayor cantidad de activos, también se llevó a cabo el proceso de inoculación, el que fue catalogado como un gran paso para la Región, por parte del gobernador de Biobío, Ignacio Fica.
