Vecinos de la comuna esperan llevar a cabo una consulta ciudadana para evitar que iniciativa se lleve a cabo en la zona. SEA debe evaluar observaciones.
En la ruta que une Concepción con Penco, a la altura del kilómetro 5 (donde está el ingreso al vertedero municipal y a seis kilómetros al interior del mismo), se pretende instalar un yacimiento minero para extraer “tierras raras” en una superficie de 270 hectáreas, aproximadamente.
Se trata de un proyecto de gran envergadura si se considera que procesará 240 toneladas hora de maicillo granítico y una producción de 1.700 toneladas anuales de óxido del material, con una vida útil de 15 años.
Sin embargo, en Penco la iniciativa no convence a todos. “Si la respuesta es favorable por los municipios involucrados y las Seremis de Medio Ambiente y Vivienda y Urbanismo, se produciría un gran impacto en la zona”, detalló Rodrigo Vera, integrante del Comité de Expertos de la Unión Comunal de JJ.VV. de Penco y miembro del equipo redactor de las nuevas observaciones al proyecto “tierras raras”.
La eventual concreción de la obra, dicen los vecinos, sería la puerta de entrada para macroproyectos mineros de “tierras raras o biolántidos” en la provincia de Concepción, generando un impacto aún desconocido en la población de las comunas circundante y también de su entorno más directo.
Considerando que el proyecto minero, implementado por la empresa ER1, se encuentra en una de las zonas con mayor concentración de personas del país (provincia de Concepción), representantes de mencionada Unión Comunal, acompañados por una veintena de dirigentes vecinales, llegaron hasta la oficina de partes de la municipalidad de Penco para presentar lo que ellos denominan nuevas observaciones a la adenda de “tierras raras”.
En dichas observaciones, enfatizan en la necesidad de un nuevo proceso de participación ciudadana, para que los habitantes de la comuna pencona puedan expresar su opinión de la iniciativa minera.
Junto con destacar el trabajo que ha realizado, el presidente de la Unión Comunal de JJ.VV. de Penco, Romualdo Sáez, explicó que “decidimos crear un comité de expertos que estudiaran a fondo la iniciativa y elaboraran un documento que reuniera nuestras observaciones, para que sean ingresadas al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), a través de la municipalidad”.
Sobre el particular, Rodrigo Vera explicó que “ingresamos a la municipalidad de Penco las respuestas a la adenda de la empresa que indican que el proyecto minero fue modificado. Ello dará lugar a un proceso de Participación Ciudadana donde los vecinos puedan opinar respecto a este proyecto que es vinculante para la comuna de Penco”.
Las observaciones deberían ser ingresadas al SEA por la municipalidad de Penco, indicó Vera, y con ellos se demostraría que “el proyecto fue modificado y de realizarse tendría un impacto irreparable en la zona”.
Consultado por el tema, el alcalde Víctor Hugo Figueroa (DC) precisó que “recién en enero de 2019 tuvimos acceso al proyecto y valiéndonos que el SEA permite observaciones en contra, hicimos observaciones el mismo mes, las que sumadas a las de otros vecinos llevó a que ER1 congelara su tramitación durante un año. Ahora viene decir si estamos conformes o no, con las observaciones en contra que nos entregaron. Nuestro objetivo es que el proyecto no se lleve a cabo, ya que iría en contra de nuestra comuna”.
Como “tierras raras” se le conoce a un grupo de 17 elementos químicos, en su mayoría del grupo de los lantánidos, que se encuentran en diferentes yacimientos mineros del mundo, como Penco.
“Estos lantánidos, conocidos coloquialmente como ‘tierras raras’, son utilizados para el desarrollo de la tecnología moderna por industrias de importancia primaria, pero se desconoce el impacto que tendría su explotación en la fauna nacional, que es algo que estoy abordando en un proyecto posdoctoral en la Universidad de Concepción”, comentó el investigador y doctor en Ciencias Ambientales UdeC, Winfred Espejo.