A propósito del Día Mundial sin Tabaco, que se conmemoró ayer, médicos aclaran que fumadores tienen mayor riesgo de sufrir enfermedades respiratorias. Estar en confinamiento es el escenario ideal para dejar la dependencia al cigarro.
El 31 de mayo se conmemoró el Día Mundial sin Tabaco, adicción que mata a más de ocho millones de personas cada año, según detalló la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El riesgo aumenta con la pandemia, puesto que fumar es un factor de riesgo ante cualquier enfermedad respiratoria. Así lo explican médicos especialistas en enfermedades broncopulmonares, quienes precisaron que la dependencia al tabaco aumenta las posibilidades de desarrollar síntomas graves en caso de contraer Covid-19.
Lo anterior, ya que el coronavirus es una infección que ataca directamente a los pulmones, deteriorando varios componentes de los mecanismos de defensa del aparato respiratorio y, en el caso de ser fumador, es el ambiente favorable para infecciones respiratorias bacterianas o virales, lo que podría explicar el porqué, a este grupo poblacional, les ataca más fuerte la Covid-19.
“El tabaco produce la inflación de la vía aérea y la inmunidad de esta, lo que produce mayor riesgo en caso de contraer coronavirus, además, es un factor de riesgo importante ante otras enfermedades asociadas al tabaquismo, tales como las enfermedades cardiovasculares, cáncer, entre otras”, explicó la Dr. Claudia Azócar, médico broncopulmonar y docente de la Universidad de Concepción (UdeC).
En la misma línea, el médico broncopulmonar y jefe de la unidad de Prevención y del Programa de Abandono del Tabaco de Clínica Santa María, doctor Pedro Peña, dijo que tras revisar diversos estudios, un grupo de expertos en salud pública reunidos por la OMS, el 29 de abril de 2020, estableció que los fumadores tienen más probabilidades de necesitar respiradores mecánicos invasivos, a diferencia de los no fumadores.
“El consumo crónico de cigarrillo daña los mecanismos de defensa de bronquios y alvéolos, deteriora la capacidad respiratoria, dejando poco margen de reserva a la insuficiencia respiratoria”, aclaró el especialista.
Los especialistas indican que el estar en confinamiento es una buena opción para dejar la dependencia. “El hábito de fumar tiene muchas formas de hacer daño, ya que se generan depósitos de materiales dentro del pulmón, lo que frente a la Covid-19 hace más lábil a la enfermedad y de contraerla sería muy perjudicial”, dijo el presidente del Colegio Médico Bío Bío, Germán Acuña.
Agregó que “quienes dejen el cigarrillo en este momento, van a aumentar las posibilidades que, en caso de contraer el virus, este no sea tan invasivo”.
En el caso de fumadores crónicos, el broncopulmonar Pedro Peña indicó que “algunas recomendaciones para dejar el tabaco son: atrasar al máximo el primer cigarrillo, evitar el consumo de alcohol y café que estimulan el deseo de fumar, masticar chicles, comer caramelos sin azúcar o consumir abundante agua. Pruebe actividades que mantengan sus manos ocupadas”.
Disminuir el consumo de cigarrillos genera varios beneficios. “Se reduce la tensión arterial y la frecuencia cardiaca y las posibilidades de sufrir enfermedades coronarias (infarto), cáncer de pulmón, de boca, de laringe esófago, vejiga, entre otros, la bronquitis crónica (Epoc) y accidentes cerebrovasculares”, sostuvo el broncopulmonar.