Se trata de recintos emplazados en las comunas de San Pedro de la Paz, Tomé y Mulchén. Desde el Ejecutivo esperan que estos ayuden a generar avances en la materia, que presenta bajos indicadores.
Hasta el Ceat de San Pedro de la Paz llegaron este martes las autoridades de la Región del Bío Bío para dar a conocer los nuevos tres colegios de la zona que se sumarán a la modalidad de “Bicentenarios”.
Modalidad de establecimientos educacionales que surgieron en la anterior administración de Sebastián Piñera que busca, según sus principios, entregar una educación de calidad, basada en las altas expectativas, foco en los aprendizajes y en las salas de clases.
Si bien en un principio se hizo foco en la educación municipalizada, ahora se han integrado establecimientos particulares subvencionados y de administración delegada.
A contar de ahora, el Ceat de San Pedro de la Paz, el Liceo Industrial de Tomé y el Liceo Nuevo Mundo de Mulchén, son los establecimientos que este año firman el compromiso por la calidad de la educación, los que suman ocho en la Región del Bío Bío.
El intendente Sergio Giacaman destacó que “se ratifica un compromiso por el trabajo hacia la calidad de la educación y los resultados de estos colegios son bastantes exitosos. El foco de mis palabras va en que mis esfuerzos se vuelquen en la innovación, nosotros figuramos con muy malos indicadores, somos la segunda región con menos avance a nivel nacional”.
Mientras que el seremi de Educación, Fernando Peña reconoció que “estos tres establecimientos se incorporan a una red de alta exigencia, que tienen mucha demanda en el Sistema de Admisión Escolar que se hace necesario ir multiplicando a nivel regional”.
Peña reconoció que sólo un colegio de estos tres es de administración municipal.
En la actividad participaron los directores de los tres colegios que se suman a esta modalidad.
Para ellos, que reciban este tipo de denominación trae consigo desafíos que van más allá de modificaciones a la forma de impartir las clases.
Para Claudio Ihl, director del Ceat, esto es un desafío que recién comienza. “El proyecto supera el paradigma de los contenidos y las notas. El modelo del Liceo Bicentenario se basa en los logros de aprendizaje, en donde el 80% de los estudiantes del nivel deben alcanzar un nivel estándar, de esa forma se avanza. Hay un equilibrio entre cobertura curricular y el logro de aprendizaje”.
En tanto, Andreina Borzone, gerenta General de la Corporación de Estudio, Capacitación y Empleo de la CPC, que administra el Liceo Industrial de Tomé considera esto como un desafío. “Mejoramos la calidad de nuestros aprendizajes en el aula y fortalecemos la alternancia en la educación dual”.
Eduardo Fuentes, del Liceo Nuevo Mundo de Mulchén manifestó que están con los pies bien puestos en la tierra, ya que tienen que cumplir una serie de requisitos. “Uno de los desafíos es cumplir con los criterios con los que se evalúan los colegios, que son las pruebas estandarizadas”.