Hoy se investiga si los episodios de contaminación se deben al petróleo iraní descargado por Enap en Talcahuano.
La fiscal regional del Bío Bío, Marcela Cartagena, confirmó un posible vínculo entre la emergencia ocurrida en agosto en Talcahuano, a raíz de un supuesto olor a gas que obligó la evacuación del Mall Plaza Trébol, con los episodios de contaminación en Quintero y Puchuncaví.
Cartagena asumió la jefatura de esa investigación, desde el 20 de noviembre pasado, equipo en el que también están la fiscal de Talcahuano y especialista en delitos medioambientales, Ana María Aldana, y el fiscal jefe de Quintero, Mauricio Dunner.
La fiscal Cartagena no descartó que ambos episodios tengan relación, ya que se investiga si los episodios de contaminación se deben al petróleo iraní descargado inicialmente por Enap en Talcahuano.
“Podemos tener un principio de ejecución en la Región, con el episodio que ya se conoce, el del 4 de agosto. Estos episodios podrían estar vinculados y, por eso, los estamos investigando”, precisó la fiscal, quien aclaró que ambas pesquisas están aún separadas, pero podrían unirse.
El abogado querellante en el caso, Remberto Valdés, quien representa a 696 personas víctimas de contaminación en Quintero y Puchuncaví, explicó que el posible nexo entre la emergencia en esa comuna y el episodio de agosto en Talcahuano, “coincide con lo que planteamos en nuestras querellas, donde solicitábamos al Ministerio Público investigar esta posible conexión. Nos parecía convincente la teoría que el hidrocarburo iraní, que es de alta toxicidad, que se desplegó en agosto en la bahía de Concepción y Talcahuano, que causó alarma pública y la evacuación del mall y de la clínica Bío Bío, estaban íntimamente relacionados con las descargas que se en Quintero por parte de Enap”, dijo el abogado y agregó que el hecho de que pudiera haber un principio de ejecución en la zona obliga a investigar la contaminación que pudiera haber acá.
“Yo creo que es un deber ineludible que el Estado de Chile cumplir con su deber de proteger los derechos humanos, dentro de los cuales está el derecho a la salud, la integridad física y psíquica, y el derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación”, planteó Valdés.