Las intensas precipitaciones que se registraron el 29 de mayo en la Región y que dejó 350 personas damnificadas en Tomé, dejó en evidencia las precarias condiciones en las que viven cientos de familias, quienes están cansadas de verse afectados con cada sistema frontal.
Por eso y para evitar futuras emergencias, los afectados de la comuna presentaron un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de Concepción para que tanto el Ministerio de Obras Públicas como la Municipalidad de Tomé tomen medidas preventivas y de resguardo para sus habitantes.
El abogado de las familias, José Luis Herrera, explicó en Radio Bío Bío que las inundaciones son atribuibles a la falta de limpieza de los canales Egaña y León Lugo, pero también a la falta de un sistema de colectores de aguas lluvias.
En total fueron 72 familias las que presentaron el recurso de protección.