Su nivel de peligrosidad está dado porque el usuario no tiene certeza de la droga que está consumiendo ni de la cantidad impregnada en la estampilla que compra.
El 7 de octubre de este año, ocurrió el primer decomiso de una droga que no se había visto en la Región: la Brolamfetamina o DOB, incautada por primera vez en la zona por la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (Brianco) penquista, que detuvo a tres personas, quienes se dedicaban al tráfico de sustancias de síntesis y otros estupefacientes.
La incautación de sustancias de síntesis denominadas DOB y éxtasis (Mdma) se efectuó en primera instancia en el peaje Agua Amarilla y posteriormente, en un domicilio de Lorenzo Arenas se decomisó 1 kilo 613 gramos de cannabis creepy, 259 dosis de clorhidrato de cocaína, un arma de fuego y munición de diferentes calibres, además de dinero en efectivo.
La DOB tiene un efecto alucinógeno de entre 18 a 30 horas, tiene un alto valor adquisitivo que fluctúa entre los 25 a 30 mil pesos por cada papel impregnado con la sustancia sintética, que en este caso tenía impresa la imagen de Albert Einstein.
Tras la formalización, dos de los imputados quedaron en prisión preventiva y uno en arresto domiciliario total.
Justo un mes después, los detectives incautaron 160 dosis de “25I – NBome”, droga altamente alucinógena que un hombre, detenido por la policía, comercializaba en las cercanías de la Universidad de Concepción.
La sustancia es conocida como una droga psicodélica derivada de la feniletilamina sustituida 2C-I. Fue descubierta en 2003 en Alemania. Es consumida a través de pequeñas piezas de papel o estampillas que son absorbidas por el cuerpo a través del paladar.
En este caso, el imputado se abastecía de la droga en Argentina, donde tiene familiares, para posteriormente trasladarse hasta la Región del Bío Bío para su venta, la que hacía en 12 mil pesos por dosis.
El 25I-NBome dura aproximadamente 6 a 10 horas en el cuerpo y puede provocar en el consumidor desde arritmia hasta paro cardíaco.
La investigación se desarrolló por 2 meses y en ella se estableció que el individuo viajó a Argentina en 7 oportunidades, presumiblemente para abastecerse de la sustancia.
Fenómeno mundial
El subprefecto Eduardo Flores, jefe de la Brianco, aseguró que no se sorprendieron cuando incautaron estos alucinógenos, ya que son parte de un fenómeno mundial y nacional, pero sí aseguró que son drogas peligrosas, ya que quienes las consumen no tienen la certeza de los químicos que están adheridos a estas estampillas.
“Es un fenómeno mundial, entonces es innegable que en el país aparezcan estas drogas de tipo sintéticas. Vienen impregnadas en estampillas, pero las personas no saben qué es lo que están consumiendo. Algunos las compran como LSD, pero cuando las examinamos se establece que es otro tipo de droga, entonces consumen cosas que a veces no saben”.
Agregó que pueden impregnar cualquier droga alucinógena en cualquier tipo de soporte, incluso quienes las distribuyen.
Y aunque ya se han registrado incautaciones, insistió en que han sido diligencias puntuales. “Son apariciones incipientes, ya que son grupos reducidos y obviamente cerrados los que tienen acceso a este tipo de droga, porque no están masificadas. Y son dañinas precisamente porque es muy difícil saber qué cantidad o qué dosis está consumiendo en el trozo de estampilla que ingresa al cuerpo”.
El jefe policial agregó que son porcentajes menores dentro de los decomisos totales, pero que están atentos ya que “siempre hay una cifra negra en estos casos, pero las calidades de investigación que estamos llevando con el Ministerio Público nos hace tener un análisis de información que permite adelantarnos a los sucesos y a los diferentes tipos de drogas que pueden llegar a la zona”.